La estrategia emprendida por Adam Silver, comisionado de la Asociación Nacional de Basketball desde 2014, ha provocado un alza en el valor promedio de los equipos de la liga que no beneficia directamente a la asociación, por lo que Silver estaría analizando la posibilidad de crear un vehículo de inversión que le permita a la liga adquirir participaciones minoritarias en algunos de sus equipos, de acuerdo con reportes de Bloomberg.
La reciente venta del 50% de los Brooklyn Nets a una valuación de 2,300 millones de dólares volvió evidentes dos problemas: el primero es que será cada vez más difícil encontrar compradores dispuestos a pagar por un equipo y el segundo es que han sido los equipos, más que la asociación, quienes se han beneficiado del repunte de la liga.
Bajo el mandato de Silver, la liga ha emprendido una innovadora estrategia de marketing y redes sociales con especial énfasis en impulsar la popularidad del deporte fuera de Estados Unidos, y la apuesta ha rendido frutos: según la propia asociación, de los 1,400 millones de personas en China, 640 millones vieron un programa producido por la NBA en la temporada 2017-2018.
La asociación ha utilizado esta creciente popularidad internacional, la firma de lucrativos contratos de transmisión y la construcción de múltiples arenas (6 en los últimos 9 años), para impulsar el valor del deporte y de sus equipos. En promedio, los equipos han visto alzas de 150% en su valuación en los últimos 5 años, y todos ellos están valuados por encima de los 1,200 millones, con algunos cerca de los 4,000. La liga también se ha beneficiado, pero no en la misma medida.
Como ejemplo: de acuerdo con Forbes, la NFL genera alrededor del doble de ingresos que la NBA, a pesar de organizar muchos menos partidos al año (267 contra al menos 1,290 por temporada).
El modelo sugerido por Silver, que apenas se encuentra en proceso de discusión con los dueños de los equipos, serviría para comprar pequeños bloques de acciones en los equipos, aunque estas seguirán siendo caras: 5% de un equipo de 2,000 millones costaría 100 millones de dólares, menos un descuento por no tener asientos en la junta directiva ni votos en las decisiones del equipo.
Esta falta de control es vital para el proyecto de Silver, pues un interés mayoritario en alguno de los equipos daría lugar a acusaciones de condiciones preferenciales, tal y como ocurrió en el draft de 2012, cuando la NBA tenía el control de New Orleans Hornets, antes de que Silver asumiera la posición de comisionado.
Este vehículo de inversión permitiría a la liga compartir las ganancias de los equipos, al tiempo que permitiría a equipos, sobre todo de pequeños mercados, inyectar liquidez a sus organizaciones.
Los equipos de pequeños mercados serían los primeros beneficiados: los Memphis Grizzlies, los New Orleans Pelicans y los Charlotte Hornets son los tres equipos menos lucrativos de la liga y todos ellos han tenido problemas en el pasado para generar interés suficiente de compradores.
Equipos más grandes también podrían beneficiarse: los Phoenix Suns, los Washington Wizards y los Sacramento Kings también han sufrido para vender partes proporcionales de sus equipos, principalmente por el valor relativamente bajo de su marca.
La propuesta estará abierta a comentarios antes de la junta de dueños el próximo 20 de septiembre en Nueva York.