La Secretaría de Comunicaciones, Infraestructura y Transportes (SICT) publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la modificación al título de concesión de Ferrosur, perteneciente a Grupo México, de Germán Larrea, mediante la cual se excluyen algunos tramos y se amplía su vigencia.
El cambio deja fuera de la concesión otorgada en 1998, la operación, explotación y prestación del servicio público de transporte ferroviario de carga de los tramos de Coatzacoalcos a Medias Aguas en la líneas ‘Z’, Hibueras a Minatitlán en la línea ‘ZA’ y Coatzacoalcos a El Chapo en la ‘FA’.
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Asimismo, se establecen derechos de paso para la subsidiaria de Grupo México en estos tramos.
Como indemnización en especie por el rescate de dichas vías, el gobierno federal otorgará la primera prórroga del título de concesión y ampliación de exclusividad, con base en la opinión del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales
indicó la publicación.
La prórroga del título de concesión se otorgó por un plazo de ocho años, con lo que en lugar de terminar en 2048, lo hará en 2056.
Mientras los derechos de exclusividad para prestar el servicio público de transporte ferroviario de carga se modificaron de 30 a 58 años.
Incorporan tramos al Ferrocarril del Istmo
En otra publicación realizada el mismo día, la SICT modificó el título de asignación que se otorgó en 1999 a Ferrocarril de Istmo de Tehuantepec (FIT), una empresa de participación estatal mayoritaria.
Con ello, se incorporan los tres tramos que se excluyeron de la concesión de Grupo México para su operación, explotación y prestación del servicio público de transporte ferroviario de carga y pasajeros.
En el documento se indica que Ferrosur expresó su interés para ‘recuperar’ los tramos excluidos de su concesión en caso de que en el futuro dejen de formar parte del título de asignación del FIT, que éste deje de ser organismo público o entidad paraestatal, o bien, si los derechos de este título se transfieren a un privado.
Ambas publicaciones oficializan el acuerdo al que llegaron el gobierno federal y la compañía propiedad de Germán Larrea en semanas previas, tras un desacuerdo que derivó en una toma de instalaciones por parte de las Fuerzas Armadas y sacudió el precio de las acciones del conglomerado en bolsa.
La disputa giró en torno a un tramo clave para el proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), que conectará por la vía terrestre a los puertos de Salina Cruz, en Oaxaca, con Coatzacoalcos, en Veracruz, a lo largo de los cuales prevén desarrollar parques industriales.
