La fundadora de Theranos, Elizabeth Holmes, solicitó a un juez federal de Estados Unidos que no la envíe a la cárcel, al tiempo que espera su sentencia la próxima semana por haber defraudado a los inversionistas con la promesa de que su compañía revolucionaría los análisis de sangre. 

Los representantes legales de Holmes solicitaron que en la sentencia que se dictará el próximo 18 de noviembre se le impongan sólo 18 meses de confinamiento domiciliario y servicio comunitario.

De acuerdo con la defensa de Holmes, el tiempo en prisión es incensario para evitar que la exempresaria vuelva a incurrir en algún delito al considerar que es una persona que aún tiene “mucho que dar”.

Pedimos que el tribunal considere, como debe ser, la persona real, la empresa real y las circunstancias complejas que rodean el delito

 indicaron los abogados.

A inicios de año, los abogados de la mujer de 38 años buscaron defenderla bajo el argumento de que trabajó durante 15 años para llevar a Theranos al éxito y no debe ser castigada por no lograr su sueño. 

Leer más: Juicio por fraude contra Ramesh Balwani, pareja de Elizabeth Holmes en Theranos llega a su fin 

El proceso de Holmes

En enero, la exdirectiva ejecutiva fue declarada culpable de cuatro de 11 cargos de fraude y conspiración por un jurado en San José, California, cada uno de ellos conlleva una pena máxima de prisión de 20 años.

Quien en algún momento fue considerada como la nueva “Steve Jobs” tomó la decisión de  abandonar la Universidad de Stanford para, a sus 19 años, fundar la empresa Theranos.

El nacimiento de la compañía tenía como objetivo contar con una alternativa más económica y eficiente al análisis de sangre tradicional, prometiendo detectar enfermedades como el cáncer y la diabetes con sólo unas gotas de sangre.

 La innovadora idea atrajo a diversos inversionistas, lo que en 2014 ubicó a Holmes como la multimillonaria más joven que forjó su propia fortuna. Para finales de ese año Theranos ya tenía una recaudación de 400 millones de dólares

Pero el auge de Holmes duraría poco, en 2015 The Wall Street Journal publicó historias que apuntaban a fallas en la tecnología de Theranos, lo que llevó a investigaciones por parte de los reguladores estadounidenses que concluyeron en que la tecnología utilizada para los estudios representaba un peligro para la salud. 

Aunque Holmes buscó defender su trabajo, para junio de 2016 su riqueza era ya de 0 dólares. Un mes más tarde Theranos perdió su licencia para operar y se le prohibió a la fundadora de la compañía dirigir un laboratorio de análisis de sangre durante dos años. 

Posteriormente llegaron las demandas civiles que mantienen a Elizabeth Holmes a la espera de su sentencia.   

Leer más: El auge, fraude y derrumbe de Elizabeth Holmes que fue declarada culpable de fraude 

Con información de Reuters