Los bancos en México perfilan resultados positivos en el segundo trimestre, a medida que continúan beneficiándose del entorno de tasas elevadas y el dinamismo en la demanda de crédito.
Sin embargo, en lo que resta del año la desaceleración económica global o una eventual recesión podría reflejarse en el avance de la cartera y los índices de morosidad, señaló Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más (Bx+).
“Se espera que empiece a haber una desaceleración económica en el tercer trimestre, pero con mayor claridad en el cuarto trimestre y el primero de 2024”, comentó el especialista durante una ponencia en el Revolution Banking & Retail Forum Latam 2023.
Ante este escenario, la institución esperaría que la demanda por crédito se diluya ligeramente debido al entorno de menor confianza económica.
En segundo lugar, que se vuelva más difícil pagar esa deuda de quienes ya tienen un crédito, porque si el costo financiero sube y sus ingreso bajan por un menor crecimiento económico, esto podría generar problemas de morosidad en la banca
apuntó Saldaña.
El economista en jefe de Bx+ destacó que los altos el sistema bancario mexicano tiene ‘un colchón’ para enfrentar un panorama adverso debido a sus niveles de capitalización en máximos históricos.
Avance en carteras y utilidad
En el primer semestre del año, los bancos han mantenido la racha alcista en las ganancias, mientras la cartera de crédito al consumo ha crecido a doble dígito.
Cifras de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) al cierre de mayo, últimas disponibles, mostraron que las utilidades netas del sistema ascienden a 114,519 millones de pesos, cifra que representa un incremento de 25.3% anual.
La cartera de crédito al cierre del quinto mes del año acumulaba un crecimiento de 10.1% anual, liderada por el crédito al consumo, con un avance de 18% respecto al año previo.
En cuanto al índice de morosidad (IMOR), el nivel fue de 2.17% para la cartera total, contra el 2.41% del año previo; mientras en la cartera de crédito al consumo se ubicó en 3.07%, ligeramente por arriba del 3.02% de mayo de 2022.
“Son bancos sólidos, estables, con buenos ingresos y buenos niveles de utilidad en este entorno de altas tasas de interés”, comentó Saldaña.
En una nota de análisis, Bx+ señaló que entre los bancos que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (Banorte, Inbursa, Regional, Banco del Bajío y Compartamos), la cartera de crédito creció 14.5% anual a mayo, por encima del total del sector.
En tanto, el índice de morosidad de estos bancos se ubicó en 1.60%, por debajo del IMOR del sistema.