Los 144,300 millones de pesos que el gobierno federal destina en forma de apoyos gubernamentales para adultos mayores y jóvenes sin estudios ni empleo han tenido un impacto poco significativo para el consumo en el país.
En marzo, los ingresos por suministro de bienes y servicios al por mayor tuvieron su peor desempeño desde el mismo mes de 2008, al registrar una variación anual negativa de 3.4%, según el último indicador de empresas comerciales elaborado por el Inegi.
En tanto, los ingresos por suministros de bienes y servicios al por menor tuvieron en marzo su tercer mes más débil desde 2013.
De acuerdo con Vicente Yáñez, presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), las ayudas entregadas en efectivo carecen de un candado para evitar que sean desembolsadas en el comercio informal.
Ahora, con las tarjetas se puede ir al cajero para sacar el dinero y se le puede dar el destino que sea. Pensamos que esta no es la orientación original para el que fueron hechos los programas sociales y creemos que su destino debe ser la economía formal
dijo Vicente Yáñez, presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD).
“Las ayudas no serán significativas en el consumo, porque hay un entorno en donde ha habido recortes laborales. La tasa de desempleo está aumentando y no necesariamente se puede compensar, además de que los recortes han sido a nivel directivo, los que desembolsan más”, comentó Verónica Uribe, analista de Monex Casa de Bolsa.
En abril, la tasa de desocupación se ubicó en 3.5%, con una variación de 0.1 puntos porcentuales que el mismo mes del año anterior, según el Inegi.
Durante el inicio de la administración se estimaba que el dinero para las personas de la tercera edad y los jóvenes tendría un efecto positivo para las cadenas departamentales, de autoservicios y de consumo en general, porque las personas tendrían un ingreso extra y con ello un mayor poder de compra.
ANTAD quiere modificación a la entrega de apoyos
Ante la situación que se presenta y con el objetivo de que exista un beneficio a la economía formal del país, la ANTAD, que agrupa a las principales tiendas como Liverpool, Soriana o Chedraui, planea discutir con el gobierno el poner barreras en los lugares donde se gasta el dinero.
Los apoyos tienen que tener una orientación hacia el mercado formal y se tienen que hacer los ajustes necesarios para que así sea
dijo Yáñez.
Agregó que su importancia radica en que los recursos dados a la población son fiscales y que de esta forma tiene la posibilidad de hacerse un círculo virtuoso en donde esos montos regresen a la hacienda pública.
“Hay que recordar que estos son programas que todos los mexicanos estamos pagando con nuestros impuestos y tenemos que generar un círculo virtuoso en que estos montos regresen al gobierno”, comentó el ejecutivo de la ANTAD.