La situación sanitaria y sus consecuencias económicas están marcando un antes y un después en el desarrollo del mundo laboral, según la encuesta ‘Nueva normalidad, nuevas formas de trabajo’ elaborada por PwC México.

El documento, que contó con la participación de más de 500 trabajadores mexicanos, revela cuáles son las expectativas de la fuerza laboral sobre la vuelta a los centros de trabajo: 97% de los encuestados apoya que se establezca el home office de manera permanente.

Entre otros de los principales hallazgos del reporte destaca que de este porcentaje, 30% prefiere hacer home office tres días a la semana, de acuerdo con el comunicado de la firma.

En este sentido, 58% de los encuestados asegura que su productividad aumentó durante el confinamiento, frente al 35% declara que se mantuvo.

Otro aspecto positivo del sondeo es que para 47% de los encuestados, la colaboración aumentó trabajando a distancia, mientras que el 44% consideró que permaneció igual.

Home office: de opcional a obligatorio

Previo a la pandemia, el trabajo remoto no era una realidad para el total de las empresas que operan en México.

Casi la mitad (46%) no lo había adoptado todavía por distintas razones, entre las que destacan: la necesidad de una colaboración cercana con sus equipos de trabajo (25%), su ausencia en las políticas de empresa (20%) o la falta de herramientas tecnológicas o de acceso a los equipos de trabajo (16%), así como la construcción de relaciones sólidas con sus compañeros (14%).

Sin embargo, la crisis sanitaria y las medidas de distanciamiento social han servido para derribar la principal barrera para adoptar el teletrabajo: la caída de la productividad.

En abril pasado, el 55% de los líderes financieros no confiaba en que la productividad de los colaboradores sería la misma fuera de la oficina. Sin embargo, en el corte del 15 de junio, el porcentaje se redujo al 17%.

El confinamiento ha puesto a prueba la capacidad de las empresas y sus colaboradores, al invitar al análisis de si los actuales modelos operativos y las habilidades disponibles en nuestra fuerza laboral son las que realmente nos conducirán al éxito en los próximos meses y años

asegura Carlos Zegarra, socio líder de Management Consulting en PwC México.

En ese sentido, el especialista comentó que también ha servido para desterrar mitos, como la supuesta baja de productividad que podría ser atribuida al trabajo a distancia.

Incluso algunos empleadores han comenzado a darse cuenta de las ventajas que representa el teletrabajo, lo que podría llevar al recorte de empleos.

La tecnología en la nueva normalidad

Contar con las herramientas adecuadas y con una fuerza laboral capacitada se han convertido en elementos clave para salir fortalecido de situaciones críticas como la actual.

En cuanto a la productividad, 94% de los directores financieros encuestados confía en implementar medidas orientadas a mejorar las habilidades del futuro.

Por ejemplo, 16% de las organizaciones mexicanas planeaba invertir en herramientas que fomenten la colaboración interna o con clientes, mientras que 23% lo hará en aquellas que permitan la reducción de costos como la automatización.

En tanto que el 26%, invertiría en las que apoyen el crecimiento, como el e-commerce, entre otras.

Desde el punto de vista de seguridad y bienestar, hoy en día, existen aplicaciones que facilitan el monitoreo del estado de salud y el nivel de contacto entre las personas en tiempo real e, incluso, apoyan a establecer métodos de limpieza, mitigar riesgos y simplificar la toma de decisiones,.

Además, otras que hacen pronósticos y gestionan una productividad más orientada a los objetivos y estrategias de la organización.

Confianza en las medidas sanitarias

Casi la mitad de los encuestados, 49%, confía en las medidas que las empresas contemplan para garantizar el bienestar y la seguridad de los empleados en los centros de trabajo.

El reto principal en la vuelta a los centros de trabajo no solo consiste en garantizar un entorno seguro desde el punto de vista sanitario

agregó Carlos Zegarra.

Por ello, destacó la importancia de ser capaz de detectar posibles focos de contacto y aislarlos de forma efectiva para evitar contagios que pongan en riesgo la salud de toda la fuerza laboral.

Asimismo, añadió que una herramienta de rastreo es muy útil, ya que permitirá a las empresas garantizar el bienestar de todos sus empleados y conocer con qué recursos cuenta para seguir siendo productiva.

En lo que respecta a las acciones que harían sentir más seguros a los trabajadores, el reporte destaca que casi la tercera parte de los encuestados está preocupado por las medidas de seguridad e higiene.