Gruma, el productor líder de harina de maíz en México tiene un objetivo claro este año: reducir la deuda que acumula.

Al mes de septiembre de 2018, la empresa tenía una deuda de 1,163 millones de dólares, el mayor monto registrado desde 2013, cuando ascendía a 1,372 mdd.

Antes de que acabara el año pasado, Gruma recibió un crédito de 250 mdd que utilizaría para liquidar diversos pasivos a corto préstamo.

Dicho préstamo fue realizado por el banco canadiense Bank of Nova Scotia, con vencimiento de seis años y con una tasa de interés de 2.79%.

Con este crédito, Gruma pretende refinanciar la deuda que tiene para que en los siguientes dos o tres años más inmediatos no tengas un flujo acumulado qué pagar o recursos que destinar a este tema

dijo Roberto Solano, analista bursátil en Grupo Financiero Monex.

Añadió que, la deuda reportada está ajustada, al no considerar el ajuste contable conocido como NIF16. Al aplicarse el apalancamiento de la compañía ascendería 217 mdd, a 1,380 millones.

Gruma tendrá que pagar 361 mdd en los siguientes tres años, que solventaría el 31% de su deuda, de acuerdo a las fechas de vencimiento reportadas por la compañía en su último reporte financiero.

“Hasta el tercer trimestre, la empresa presentó mejoras en sus volúmenes de venta en Estados Unidos, uno de sus mercados que más rápido crece, dando signos de recuperación”, comentó Solano.

La estrategia para crecer las ventas

El mercado nacional es uno con muy poco margen de crecimiento para la compañía, pues en la mayoría de los hogares, la tortilla está presente, incluso forma parte de la canasta básico de consumo de las personas.

Sin embargo, aún tiene una estrategia para tener un margen de crecimiento mayor en México.

“La apuesta principal para la compañía es vender productos con valor añadido y diferenciado para que los márgenes de ganancia sean más amplio y de este modo compensar lo maduro del mercado”, dijo Solano.