Los precios del petróleo avanzaron en enero, impulsados por un recorte de suministros de Arabia Saudita, y a pesar de preocupaciones sobre la demanda derivadas de los contagios por COVID-19 por las nuevas variantes del virus y el lento proceso de vacunación.

Durante enero, el WTI de Estados Unidos subió 7.6% y el Brent del Mar del Norte, 7.9%, según datos de MarketWatch.

Este viernes, el contrato de marzo del WTI retrocedió 0.3%, a 52.20 dólares por barril y el Brent para entrega en marzo, que expiró hoy, ganó 0.6%, a 55.88 dólares.

Las restricciones por el coronavirus afectan la perspectiva de demanda, pero están siendo contrarrestadas por la reducción en los suministros (…) lo que evita que los precios caigan o suban demasiado

dijo Carsten Fritsch, analista de Commerzbank

Arabia Saudita tiene previsto recortar su producción en un millón de barriles por día en febrero y marzo. El cumplimiento de los recortes de producción por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados mejoró en enero, según un sondeo.

En otro factor positivo para el mercado, los inventarios de petróleo de Estados Unidos cayeron en 9.9 millones de barriles la semana pasada, dijo un reporte del Gobierno, a lo que se suman previsiones de una leve baja en la producción del país en febrero.

Sin embargo, las ganancias del mercado se han visto limitadas por las preocupaciones sobre el estancamiento de los lanzamientos de vacunas y la propagación de nuevas variantes más contagiosas del coronavirus.

La lucha de Europa para asegurar los suministros de la vacuna COVID-19 se intensificó el jueves cuando la Unión Europea advirtió a las compañías farmacéuticas como AstraZeneca que usaría todos los medios legales o incluso bloquearía las exportaciones para garantizar que las inyecciones se entreguen según lo prometido.

El repunte esperado de la demanda mundial de petróleo depende en gran medida del ritmo de distribución de la vacuna COVID-19

mencionó Stephen Brennock, del corredor PVM

“Cualquier pérdida de impulso en los programas de vacunación socavará la fortaleza de la recuperación de la demanda mundial de petróleo”.

Con información de Reuters