El dólar superó los 20 pesos en ventanillas bancarias y el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores cayó a su menor nivel desde marzo de 2014, afectados por los temores sobre una recesión en Estados Unidos, luego que se registró una nueva inversión de la curva de rendimiento, pues las tasas de los bonos a dos años excedieron a las de los de 10 años.

Esta curva invertida es considerada una señal clásica de recesión y la última vez que se registró fue en junio de 2007, cuando se agudizaba la crisis de la deuda hipotecaria de Estados Unidos.

La curva se ha invertido antes de cada recesión que ha vivido Estados Unidos en los últimos 50 años, ofreciendo apenas una señal falsa en ese tiempo.

En su cotización interbancaria, el dólar cerró en 19.7275 pesos, según datos del Banco de México, 33 centavos más caro que ayer, es decir, una depreciación de 1.74%, su peor caída desde el 31 de mayo, cuando aún había incertidumbre sobre si Trump impondría o no aranceles a bienes mexicanos.

En ventanillas de Citibanamex el billete verde se vende en 20.02 pesos.

El Índice de Precios y Cotizaciones perdió más de 800 puntos en la jornada, para terminar en 38,642.79 unidades, su menor nivel en más de cinco años y un retroceso de 2.11% respecto al cierre del martes.

Treinta y cuatro de los 35 miembros del índice registraron pérdidas y el único que cerró en verde, Regional, registró un avance de 0.01%.

El FTSE BIVA bajó 1.92%, a 793.97 unidades, un mínimo histórico.

Los mercados del mundo cayeron con fuerza ante una ola de aversión global al riesgo producto de la publicación de débiles datos económicos en China y la zona euro que alimentaban los temores de una recesión global.

Wall Street vivió una de sus mayores caídas del año. El Dow Jones se hundió 800 puntos, es decir, 3.05%, para terminar en 25,479.42 unidades, mientras que el S&P 500 perdió 2.93%, al cerrar en 2,840.60 puntos, y el Nasdaq Composite cayó 3.02%, a 7,773.94 unidades.

Como muestra de la volatilidad de los mercados, el S&P 500 marcó su sexto movimiento intradía de al menos 2% en lo que va del año y ligó seis jornadas consecutivas con movimientos de al menos 1%.

Los 11 sectores del S&P 500 retrocedieron y la mayor caída se dio en el energético, ante la baja de 3.3% en el WTI. El sector bancario también fue de los más perdedores, con Citigroup bajando más de 5% y Bank of America, 4.7%.

Los inversionistas mantenían la atención puesta en los activos argentinos, que alargaron su desplome: el peso cerró por primera vez en 60.2 unidades por dólar, una depreciación de 7.14%, pese a la intervención del banco central, que ha inyectado al menos 305 millones de dólares de sus reservas esta semana para ayudar a estabilizar la moneda.

La economía china se deterioró en julio más de lo esperado, incluyendo una desaceleración de la producción industrial a un mínimo de más de 17 años.

El PIB de la eurozona apenas creció en el segundo trimestre de 2019, según datos publicados el miércoles, ante la pérdida de impulso de las economías de todo el bloque, especialmente la alemana, que se contrajo en el periodo abril-junio y está al borde de una recesión.

Con información de Reuters