Grupo Famsa se encuentra en un momento crítico. La empresa minorista incumplió con sus obligaciones de un bono que venció el 1 de junio de este año y sus acciones ya lo reflejan.

Los títulos de Famsa cerraron la jornada del lunes en 1.90 pesos, apenas un centavo por encima de su mínimo histórico, registrado el 11 de junio pasado. En lo que va de 2020, los títulos de la minorista acumulan una baja de 57.40%.

Como referencia, el S&P/BMV IPC, el principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores, retrocede 14.07% en lo que va del año.

La empresa no se encuentra en quiebra, sin embargo, no cumplió con sus obligaciones de un bono que venció en junio y cayó en impago. Todo indica que tiene una parte prenegociada y busca evitar el concurso mercantil

dijo Amín Vera, director de análisis económico de Black WallStreet Capital.

El área de Relación con Inversionistas de Famsa dijo a EL CEO en una llamada que los bonos, con una tasa de 7.25% y cuyo vencimiento fue el 1 de junio están en un proceso de reestructura. El bono fue por 59.1 millones de dólares.

Deberías leer: Acciones o ETF, ¿qué conviene más para un portafolio de inversión?

“Los (tenedores) que tenían al 28 de mayo de este año los bonos 2020 tienen derecho a votar a favor, en contra o abstenerse respecto al plan de reestructura propuesto por la emisora”, dijo Famsa.

Famsa ofrece a los inversionistas que voten a favor del plan de reestructura -antes del 23 de junio-, nuevos bonos a una tasa anual de 10.25%, con vencimiento el 15 de diciembre de 2023, más el importe de los intereses de los bonos 2020 que se hayan devengado, así como un pago en efectivo adicional de 10 dólares por cada 1,000 dólares, correspondientes al importe principal de los bonos 2020 de los que sean tenedores.

Los tenedores que no acepten la propuesta recibirán nuevos bonos con una tasa anual de 9.75%, con vencimiento el 15 de diciembre de 2024.

El proceso sigue vigente, el periodo de votación concluye el 23 de junio. Estamos en pláticas con los bonistas y la decisión de voto es con dos terceras partes en monto, y 50.1% en número de tenedores que se hayan acercado a nosotros o hayamos contactado

comentó Famsa.

En paralelo, la emisora dijo este lunes que pagó los intereses correspondientes al primer cupón de sus bonos senior de 9.75%, con vencimiento en 2024. Famsa dijo que reitera su compromiso de hacer frente a sus obligaciones financieras a sus acreditantes, acreedores comerciales y otros terceros.

“Normalmente, un impago de la deuda implica que la empresa está tan mal financieramente que el siguiente paso es la quiebra. Famsa quiere evitar eso. La empresa cayó en impago, pero lo que busca con esta reestructura negociada en Estados Unidos es evitar la quiebra como consecuencia del impago”, comentó Vera.

A inicios de junio, S&P Global Ratings recortó la calificación de Famsa de largo plazo a Selective Default (SD), desde CCC-. Fitch Ratings bajó la nota a Issuer Default Ratings (IDR).

Los problemas

Famsa tuvo un primer trimestre complicado, debido a las medidas de confinamiento y sana distancia impuestas por el gobierno para desacelerar el ritmo de contagios del COVID-19.

Las ventas de la compañía cayeron 4.9%, además, registró una pérdida neta de 570 millones de pesos, mientras que el índice de morosidad de Banco Famsa, una división del grupo, escaló a 16.15%, y su índice de capitalización se ubicó en 10.64%. El sistema bancario mexicano registra un índice de morosidad de 2.25% y el índice de capitalización es de 15.98%.

Los problemas de Famsa no son recientes. Desde julio de 2019, las acciones de la emisora estaban entre las favoritas para realizar ventas en corto, es decir, para hacer apuestas en contra.

Lo anterior, por la volatilidad de su flujo de efectivo, una interacción poco clara entre sus divisiones, pérdida de participación en el mercado local y estadounidense y por tener deuda en dólares, cuando sus mayores fuentes de ingresos son en pesos.

Del 8 de julio de 2019 a la jornada del lunes, los títulos de la emisora cayeron 67.07%. Desde su máximo histórico de 61.57 pesos, el 26 de abril de 2007, las acciones de Famsa se desploman 97%.