Las monedas emergentes han tenido un desempeño dispar frente al dólar en el transcurso de 2023, pues las condiciones macroeconómicas de cada país son distintas.
De acuerdo con datos de Bloomberg hasta este martes 11 de julio, de una canasta de las 23 principales divisas de economías emergentes, 13 presentan apreciaciones ante su par estadounidense.
El billete verde se ha debilitado durante el periodo, a medida que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) se acerca al fin del ciclo de alzas a su tasa de interés, mientras mejoran los datos de inflación en el país vecino.
Respecto al cierre de diciembre del año pasado, el índice dólar (DXY) acumula una caída de 1.7%, al pasar de 103.27 a 101.51 unidades.
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Los pesos, en el top de monedas
La moneda con el mejor desempeño en 2023 es el peso colombiano, con una apreciación de 15.72% contra el dólar, según muestran los datos con el tipo de cambio spot.
En segundo lugar está el ‘superpeso’ mexicano, que tuvo un primer semestre histórico y que ha sorprendido a propios y extraños con su histórica recuperación tras el golpe de la pandemia de COVID.
El top 10 de las monedas emergentes más destacadas lo completan el forinto húngaro, el zloty polaco, el real brasileño, el sol peruano, el peso chileno, la corona checa, la rupia indonesia y el lev búlgaro.
Analistas han explicado que las monedas más apreciadas son de países donde los bancos centrales adoptaron una política monetaria más restrictiva para aminorar el impacto del alza de precios.
Cabe recordar que las economías emergentes son más afectadas por la inflación cuando se reduce el poder adquisitivo de la población.
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Los contrastes
De las 10 monedas de la canasta de Bloomberg que presentan depreciaciones, el peso argentino es la más castigada ante los elevados niveles de inflación que azotan al país sudamericano.
Le sigue la lira turca, cuya cotización ha sido afectada por la injerencia del presidente Recep Tayyip Erdoğan en las decisiones del banco central.
El rublo ruso también aparece entre las monedas más depreciadas en el año, mientras persisten las tensiones geopolíticas con Ucrania y conflictos internos en la nación europea.
