Los inversionistas que han adquirido instrumentos de renta fija mexicana (bonos) están de fiesta. Después de que Banco de México recortó la semana pasada la tasa de interés referenciales, los bonos mexicanos a 10 años denominados en pesos (M10) rondan su nivel más fuerte desde octubre de 2017 y esto apenas comienza.

El rendimiento que pagan los M10 se ubicó el miércoles en 7.08% y llegaron hasta 6.97% el viernes pasado, su nivel más fuerte desde octubre del 2017. El apetito de los inversionistas hizo que el rendimiento de los bonos disminuyera, al ser más atractivo, y el precio aumentara a 109.94 pesos.

El último detonante a favor de los bonos vino luego de que Banco de México (Banxico) recortó por primera vez desde 2014 su tasa de interés para dejarla en 8%. La decisión provocó que el precio de los bonos soberanos mexicanos aumentara y el rendimiento bajara.

“Iniciamos una recomendación de posiciones largas en los Bonos M de mayor duración desde el viernes pasado después del recorte de Banxico con un comunicado muy dovish. En términos de estrategia, reconocemos que el ambiente de bajas tasas de interés en el mundo seguirá beneficiando a los bonos mexicanos”, publicó Banorte Casa de Bolsa en un reporte.

Banxico ha sido uno de los 15 bancos centrales que ha recortado, al menos, 25 puntos base su tasa de interés en lo que va de agosto. Las bajas más importantes las han dado los bancos de Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea, Bielorrusia y Mozambique, con ajustes de 50 puntos base cada uno.

Hacia adelante, podemos esperar el inicio de un ciclo bajista en las tasas de interés que durará, por lo menos tres años, y en la medida que Banxico reduzca su tasa, los bonos deberían de ir bajando rendimiento e impulsar su precio

comentó Amín Vera, director de análisis económico de Black WallStreet Capital.

Los recortes en las tasas de interés, guiadas por la Reserva Federal, se dan en un ambiente de tensiones por la guerra comercial entre Estados Unidos y China y el temor de que la desaceleración económica a nivel mundial se profundice y, en el peor de los casos, se convierta en una recesión.

Como respuesta a lo anterior, los bancos centrales han decidido empezar con una política más laxa, que permita incentivar la actividad económica.

Para finales de año, los analistas que participan en la encuesta de expectativas de Citibanamex prevén que la tasa de interés en México se ubique en 7.75% y el próximo recorte podría llegar tan rápido como en la reunión de política monetaria de septiembre.

Mientras el mercado espera nuevas bajas, el interés por los bonos mexicanos también se ha hecho notar sobre otros países emergentes como Brasil, Rusia e Indonesia. En la segunda parte de este año, casi todo el mes de julio los bonos soberanos de México se ubicaron por encima de sus pares, como un reflejo de la preocupación de los inversionistas.

Si el rendimiento de un instrumento de renta fija es elevado, la percepción de riesgo que se tiene sobre éste es mayor. Hoy en día, la tendencia se revirtió.

Por más pesimistas que seamos, México ni se hundirá, ni se volverá en la próxima Venezuela o Argentina. Somos una de las 20 economías más importantes del mundo, uno de los países más poblados y tenemos buenas expectativas de largo plazo

dijo Vera.

Venezuela y Argentina son dos países que buscan salir de la contracción económica y niveles de inflación alarmantes en los que se encuentran, además de un elevado endeudamiento.