COVID-19, el nombre científico del coronavirus de Wuhan, no ha sido suficiente para detener el paso de los mercados accionarios en el inicio de 2020.

Los principales índices de la Bolsa Mexicana de Valores, el S&P/BMV IPC, y de la Bolsa Institucional de Valores, FTSE-Biva, compiten por el segundo mejor rendimiento, en dólares, de América.

Entre los principales índices del continente, solo el NASDAQ Compuesto tiene mejor desempeño que sus pares mexicanos, en lo que va del año.

Al viernes 14 de febrero, el IPC y el FTSE-Biva tenían un rendimiento 4.99 y 5.33%, respectivamente. Mientras que el NASDAQ Compuesto ganaba 8.45%

El apetito de los inversionistas extranjeros ha sido parte del sustento del avance de los índices mexicanos.

En enero de 2020, se registró un aumento de 141.70 millones de dólares, en flujos de extranjeros hacia acciones mexicanas listadas en Bolsa, de acuerdo con datos de Banco de México (Banxico). Es la primera vez, en seis meses que el flujo fue positivo.

El saldo de la posición de extranjeros en títulos de renta variable mexicanos llegó a 150,929 millones de dólares, en el primer mes del año.

Lo que atrae inversiones es la certidumbre política y económica

dijo Guillermo Delgado, director de Operaciones en Black Wallstreet Capital.

Del lado internacional, se firmó el Acuerdo Económico y Comercial entre el gobierno de Estados Unidos y China y el Senado de Estados Unidos aprobó el T-MEC. Ambos eventos se dieron a mediados de enero y contribuyeron al optimismo de los inversionistas, no solo extranjeros, también de nacionales.

El 13 de febrero, Banxico recortó por unanimidad 25 puntos base su tasa de interés para ubicarla en 7%. Para el resto del año, el consenso de analistas espera entre dos y tres recortes de un cuarto de punto porcentual, cada uno.

Mientras Banxico siga bajando las tasas de interés, y la inflación se mantenga estable, será cada vez menos atractivo invertir en activos de deuda y comenzarán a migrar los flujos hacia el mercado de capitales

dijo Santiago Cortés, analista independiente.

Las expectativas que existen de los recortes en la tasa de interés de Banxico hacen que la renta fija luzca menos atractiva y los inversionistas, en búsqueda de un mayor rendimiento, opten por activos de más riesgo, como acciones.

Un catalizador que puede jugar a favor o en contra del mercado accionario son los reportes financieros del cuarto trimestre del 2019, de las empresas mexicanas.

Al viernes, había reportado 37.1% de la muestra del IPC, de las cuales, 23% han presentado resultados mejor a lo estimado, 61.7% ha estado en línea con el estimado de los analistas y 15.3% por debajo de las previsiones, de acuerdo con un análisis de Grupo Financiero Monex.

La reactivación del gasto federal y un crecimiento estable del PIB mexicano serían fuertes impulsores a favor del mercado bursátil mexicano, no solo en el corto plazo, sino hacia el mediano plazo. “Si la economía no está detenida, la lógica nos dice que entonces las empresas no están avanzando”, dijo Cortés.

Hasta el momento, las expectativas de crecimiento del PIB para 2020 y 2021 se mantienen sin cambio en 1.0% y 1.7%, respectivamente, de acuerdo a las estimaciones de los analistas encuestados por Citibanamex.

Adicionalmente, la ola de liquidez que impera a nivel mundial es uno de los factores que ha impulsado a los inversionistas extranjeros a buscar activos con mayores rendimientos. La inyección de liquidez de la Reserva Federal se suma a las del Banco Central Europeo y el Banco Popular de China.