La tasa de inflación anual de Argentina se disparó al 124.4% durante agosto y registró su nivel más alto desde 1991, con lo que se aviva la crisis del costo de vida en el país sudamericano.
El aumento de precios, que subieron más de lo esperado, está obligando a los compradores más afectados a afrontar un desafío diario para encontrar ofertas y opciones más baratas.
La lectura de la inflación mensual del octavo mes del año de 12.4% está elevando los niveles de pobreza a más del 40% y reviviendo la ira contra la élite política tradicional antes de las elecciones del próximo mes de octubre.
Una encuesta de analistas del banco central argentino estima que la inflación en el país sudamericano para finales de 2023 estará por arriba del 169%, un fuerte incremento respecto a su estimación del mes anterior del 141%. Para septiembre y octubre la institución predijo una inflación de 12 y 9.1% respectivamente.
Además de estar atrapada en una crisis económica, Argentina también está peleando por salvar un acuerdo de 44,000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
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Crisis influye en elecciones presidenciales
La crisis económica que atraviesa Argentina está influyendo en la carrera hacia las elecciones presidenciales del próximo mes, con el libertario radical Javier Milei como el favorito para convertirse en nuevo presidente, por delante de los candidatos del establishment, el ministro de Economía, Sergio Massa, y la conservadora Patricia Bullrich.
La inflación podría seguir empeorando en medio de la incertidumbre electoral que ha vuelto a despertar los recuerdos de la hiperinflación de los años 80 entre los ciudadanos que la vivieron.
Algunas estimaciones dicen que podría acelerarse hasta el 180%, por lo que estamos hablando de niveles récord de inflación
mencionó Damian Di Pace, analista económico.
Asimismo, Di Pace añadió que mientras otras naciones latinoamericanas ven como su inflación se enfría en Argentina ya está en tres dígitos.
Por su parte, el ministro de Economía señaló que para aliviar el impacto de la inflación sobre los trabajadores se han recortado los impuestos. Además afirmó que agosto ha sido el mes “más difícil” para la economía argentina y culpó al FMI por la devaluación del 20% de la moneda.
Los dueños de los negocios, quienes están enfrentando un ciclo complicado de incrementos de los precios mayoristas antes de enviar la mercancía y poder reabastecerse, también están sufriendo la escasez de productos debido a la incertidumbre por la inflación.
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Con información de Reuters
