James Gorman, quien transformó Morgan Stanley después de que casi colapsara durante la crisis financiera mundial, planea dejar el cargo de CEO dentro del próximo año y asumir el cargo de presidente ejecutivo.
La junta directiva y yo esperamos que ocurra en algún momento de los próximos 12 meses. Esa es la expectativa actual en ausencia de un cambio importante en el entorno externo
dijo Gorman, de 64 años, en la reunión anual de la empresa.
Gorman, quien se convirtió en CEO a principios de 2010, dijo que hay tres finalistas para asumir el cargo de director ejecutivo cuando se vaya.
Aunque no nombró a sus probables sucesores, Ted Pick y Andy Saperstein —los copresidentes de la firma con sede en Nueva York—, han estado en la carrera junto con el jefe de gestión de inversiones, Dan Simkowitz.
Gorman dijo que se desempeñará como presidente ejecutivo “por un período” después de dejar el cargo de director ejecutivo.
Creemos que esta estructura garantizará la estabilidad continua de Morgan Stanley y, al mismo tiempo, la posicionará para una década de crecimiento emocionante bajo un nuevo liderazgo
dijo.
Cerca de las 10:25 a.m. (hora de la Ciudad de México), las acciones de Morgan Stanley se redujeron 2.15% a 82.70 dólares en Nueva York, de acuerdo con datos de Investing.com.
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Revisión estratégica de Morgan Stanley
Gorman, nacido en Australia, cumple ahora 14 años en la cima de Morgan Stanley. Su tiempo como CEO estuvo marcado por una importante revisión estratégica de la empresa que se vio acelerada por dos de los acuerdos más grandes alcanzados por el gran banco de Estados Unidos en los años posteriores a la crisis financiera de 2008.
Esas transacciones, las adquisiciones de E*Trade Financial y Eaton Vance, y la creciente dependencia del banco en un motor dual del banco de inversión, así como su negocio de administración de patrimonio que genera crecimiento, han hecho que las acciones de la compañía tengan el mejor desempeño entre sus pares en la última década.
Morgan Stanley ha triplicado con creces su valor durante el mandato de Gorman, ya que convirtió a la empresa en el administrador de patrimonio más grande del mundo a partir de la compra de la correduría Smith Barney de Citigroup.
Esos movimientos se produjeron cuando las nuevas reglas bancarias y un mercado alcista masivo hicieron que el negocio constante de asesorar a clientes ricos fuera mucho más atractivo para los accionistas. Morgan Stanley ahora cotiza con la prima más alta de su valor en libros de cualquier banco importante de EU.
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Con información de Bloomberg