El primer ministro de Inglaterra, Boris Johnson, anunció el fin de todas las restricciones legales restantes contra el COVID-19 en el país europeo
Boris Johnson fue aclamado por los parlamentarios conservadores después de anunciar que Inglaterra estaba “pasando de las restricciones gubernamentales a la responsabilidad personal” en la forma en que lidiaría con el virus en el futuro.
El requisito legal de autoaislamiento después de una prueba positiva de COVID-19 se eliminará a partir del 24 de febrero.
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Las pruebas gratuitas para el público en general finalizarán el 1 de abril, aunque continuarán para las personas mayores y vulnerables, y el personal de atención social que es sintomático.
No obstante, Johnson advirtió que los asesores científicos del gobierno creían que podría haber “resurgimientos significativos”, y agregó: “Están seguros de que habrá nuevas variantes y es muy posible que sean peores que ómicron”.
Por su parte, Chris Whitty, director médico de Inglaterra, junto con Sir Patrick Vallance, el principal asesor científico del gobierno, adoptaron un tono cauteloso sobre la situación.
Whitty argumentó que, en términos de casos, la ola de ómicron aún era “alta” e instó al público a continuar con las medidas “sensatas” para reducir el riesgo de infección, como lavarse las manos y usar una máscara dentro de espacios cerrados.
Mientras miramos las próximas semanas, todavía tenemos altas tasas de Omicron e instaría a las personas en términos de consejos de salud pública, y esta es en gran medida la posición del gobierno, que las personas aún deberían, si tienen Covid, tratar de prevenir otras personas lo contraen, y eso significa autoaislamiento
agregó.
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Costo del aislamiento
Antes del anuncio, Johnson se vio obligado a posponer una reunión del gabinete de COVID-19 luego de disputas entre el Tesoro y el Departamento de Salud sobre el costo de las medidas para protegerse contra futuros brotes.
Sajid Javid, secretario de salud, argumentó que necesitaba más dinero del asignado al presupuesto del NHS para monitorear los desarrollos futuros del virus y permitir que una respuesta se amplíe rápidamente si es necesario.
Después de días de regateo, que continuaron durante la mañana del lunes, Javid acordó que absorbería alrededor de 1,000 millones de libras en costos dentro del presupuesto del NHS al “priorizar” el gasto.
Según el plan de Javid, la operación de vigilancia de la Oficina Nacional de Estadísticas Covid continuará, junto con la secuenciación genómica para detectar nuevas mutaciones.
Por su parte, Rishi Sunak, ministro de Finanzas, argumentó con éxito que esto podría financiarse dentro del acuerdo de revisión de gastos del NHS, acordado el año pasado, que a partir de abril también incluirá 12,000 millones adicionales de un aumento en las contribuciones al seguro nacional.
Bioseguridad y parlamento
Johnson también anunció una estrategia de bioseguridad actualizada que protegería al Reino Unido de amenazas que incluyen “fugas accidentales de laboratorio” y ataques biológicos por parte de actores estatales y no estatales.
Pero dijo que el programa de pruebas existente, que costó 15,700 millones de libras esterlinas en este año fiscal, tuvo que reducirse, mientras se creaban los mecanismos de vigilancia necesarios para “aumentar las pruebas” en el futuro, si fuera necesario.
Ante los aplausos de los parlamentarios conservadores, muchos de los cuales se han opuesto al uso de bloqueos y otros edictos estatales durante la pandemia, Johnson agregó: “No necesitamos leyes para obligar a las personas a ser consideradas con los demás”.
Keir Starmer, líder laborista, pidió al gobierno que publique datos que respalden el fin del requisito legal de autoaislamiento, incluido su impacto en los clínicamente vulnerables.
También pidió que las pruebas gratuitas continúen más allá del 1 de abril. “Las pruebas gratuitas no pueden continuar para siempre, pero si estás 2-1 arriba con 10 minutos para el final, no eliminas a uno de tus mejores defensores”.
Nicola Sturgeon, la primera ministra de Escocia, dejó en claro que adoptaría un enfoque más cauteloso que Johnson.
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