El aumento que han presentado los precios internacionales del petróleo seguirán impactando en los precios de la gasolina y el diésel. Sin embargo, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador aún cuenta con margen de maniobra a través de los estímulos fiscales que da a los consumidores para evitar “gasolinazos”. 

La reapertura económica que se ha dado de manera paulatina a nivel mundial ha provocado una mayor demanda de productos derivados del petróleo, lo que ha elevado los precios. De hecho, este jueves, los precios del WTI, la referencia de México, se ubicaron en 82.31 dólares el barril, 42.28 dólares más que hace un año, cuando cerró en 40.3 dólares.

Los precios de las gasolinas podrían seguir creciendo a finales del cuarto trimestre de este año, pues la demanda de petróleo se ha ido recuperando y existe un desfase entre la demanda y el suministro de energía a nivel mundial

comentó Arturo Carranza, experto en el sector energético al participar en el panel Hablemos de los costos de combustibles vehiculares en México.

Ante este escenario de mayores precios, el gobierno federal ha mantenido el estímulo fiscal a través del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS). Es decir, si el precio de los combustibles sube, se reduce este gravamen; pero si bajan los precios, el gobierno eleva la cuota de este impuesto. 

Cada viernes, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público da a conocer en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el estímulo fiscal que aplicará la siguiente semana. 

“El gobierno ha venido instrumentando el IEPS para mantener sin variaciones bruscas los precios de la gasolina”, comentó Carranza.

El director de Onexpo, Víctor Arellano dijo que, durante el 2020 cuando se registró una caída generalizada de los precios del petróleo y de las gasolinas, el gobierno no usó el IEPS, por lo que ahora que los precios han acelerado, tiene buen margen para darle continuidad, amortiguar y mantener estables los precios.

Para este año, la Secretaría de Hacienda contempla que el precio de la mezcla mexicana se ubique en un promedio de 60.6 dólares el barril de petróleo, lo que es mayor al 42.1 dólares el barril que aprobó y lo que le permitirá tener mayores ingresos petroleros. 

Alza en combustibles complica recuperación 

Los dos especialistas coincidieron en que la “crisis internacional energética” puede afectar a la recuperación económica global e incrementar las presiones sobre la inflación. Sin embargo, desestimaron que en México existan “gasolinazos”.

“En América estamos sufriendo precios altos, pero son bajos en comparación a otras partes del mundo”, comentó Carranza.

Arellano comentó que si bien los altos precios no son permanentes, estos podrían mostrar una tendencia a la baja en un periodo de 2 a 5 años.

Durante septiembre, el Índice Nacional de Precios al Consumidor se ubicó en….

En otro momento, Leticia Armenta, economista del Tecnológico de Monterrey, expuso que el margen del gobierno federal está llegando a su límite y que la capacidad que tiene para continuar con el estímulo fiscal está ligada a la condición de las finanzas públicas y al déficit que el gobierno busca tener.

El margen dependerá de hasta dónde el gobierno desea acrecentar su déficit; pero no hay mucho espacio, considerando que ni este año ni el siguiente se estima tener un balance primario positivo

Te puede interesar: Desplome del IEPS a gasolina se compensó con ingresos petroleros