Las finanzas públicas de México se podrían beneficiar ampliamente con el cobro de impuestos ecológicos, debido a que la preocupación por el cuidado del planeta es cada vez mayor, coinciden especialistas.  

El impuesto ecológico tendría grandes oportunidades, ya que todos generamos contaminación, por eso se deberían elevar con el propósito de que la recaudación sea mayor

, dijo Leticia Armenta, experta del Tecnológico de Monterrey. 

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De acuerdo con el análisis de “La proliferación de impuestos ecológicos en los estados” elaborado por Moody’s, los impuestos ecológicos representan una oportunidad para mejorar la recaudación fiscal en las entidades del país y así reducir ligeramente la dependencia de las transferencias federales

Actualmente en los impuestos ecológicos se promueve el cobro de “tarifas bajas” y se considera que su expansión dependerá de las prioridades de mitigación ambiental y del nivel de recaudación en cada entidad del país. 

“En general tendríamos que estar pensando cuál es la contribución que realizamos en términos de contaminación y buscar reducir el impacto generado”, agregó Armenta. 

Moody’s considera que “los impuestos ecológicos podrían representar una nueva fuente de ingresos propios” para los estados del país, debido a que actualmente sus ingresos se mantienen altamente concentrados en los impuestos aplicados a la actividad económica y las transferencias federales. 

Janneth Quiroz, subdirectora de análisis económico en Monex, señaló que los impuestos ecológicos serían ingresos que permitirían cubrir cualquier tipo de desbalance tributario. 

Definitivamente cualquiera que sea un ingreso adicional implicaría un apoyo para las finanzas públicas, debido a que esto les daría un mayor margen de gasto o podría compensar la pérdida tributaria que pudiera ocurrir

, explicó Quiroz. 

Entre los impuestos ecológicos más aplicados en algunas entidades del país están: emisión de gases contaminantes a la atmósfera, emisión de contaminantes en el agua, depósito o almacenamiento de residuos, entre otros. 

El cobro efectivo de impuestos

Por su parte, Verónica Zepeda, experta de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), considera que el alcance de los impuestos ecológicos dependerá de la capacidad efectiva de cobro y de las tasas impositivas

Los impuestos más eficientes son los impuestos que tienen una cuota fija, ya que este no depende del nivel de consumo, por lo que el monto de la recaudación se mantiene constante y tiende a registrar tasas de crecimiento más altas

, mencionó. 

En los nuevos impuestos ecológicos se promueve el cobro de “tarifas bajas” y estos ya se implementan en 14 entidades del país: Baja California, Campeche, Coahuila, Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, Nuevo León, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Yucatán y Zacatecas. 

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Específicamente los estados de Nuevo León y Querétaro “tienen las proyecciones de recaudación más ambiciosas”, debido a que “son aquellos con bases industriales más importantes”. Sin embargo, la calificadora considera que se tendrán que establecer prácticas eficientes de recaudación.

Finalmente, Armenta prevé que la “implementación impositiva se volverá cada vez más común en el mediano y largo plazo”, mientras que la calificadora Moody’s considera que “el impacto global en la recaudación seguirá siendo limitado en los próximos años, pero con potencial en el largo plazo”.

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