El panorama industrial del sur de México para 2024 luce prometedor, especialmente en comparación con otras regiones como el norte y el Bajío, que enfrentan desafíos energéticos y aumentos en los costos de tierras, de acuerdo con Grupo Libera. 

La firma inmobiliaria estima que Yucatán capture al menos el 10% de la inversión extranjera por concepto de nearshoring este año.

En conferencia de prensa, el director de Grupo Libera, Edoardo Tray, dijo que Yucatán lucirá como una opción atractiva para las empresas industriales que buscan establecer sus operaciones por la relocalización. 

Lo anterior gracias a la combinación de factores que incluyen crecimiento en capacidad energética y la infraestructura del Tren Maya.

A partir de  algunos indicadores del INEGI y de firmas privadas, dijo que de los 800,000 millones de dólares que lleguen por el nearshoring a la República Mexicana,  Yucatán puede alcanzar una participación mínima de 10%, que puede incrementar por la nueva línea férrea y la garantía de luz y gas.

Explicó que, el anuncio de la finalización de la ejecución de una planta de ciclo combinado por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para este año, será el factor dé empuje a la región.

Esta planta, detalló el empresario, no solo aumentará la capacidad de generación de energía en la zona, sino que también contribuirá a la estabilidad y confiabilidad del suministro eléctrico, un factor crucial para las operaciones industriales y empresariales.

Estimaciones de la firma inmobiliaria consideran que Yucatán puede alcanzar 220% en la capacidad de suministro; además, actualmente puede satisfacer la demanda energética hasta en 95%, nivel vital para mantener la operatividad en condiciones extremas, como el intenso calor del verano.

De acuerdo con el director, Yucatán actualmente puede atender la demanda de hasta 40 parques industriales, con la llegada de la planta de CFE esto puede “incrementar exponencialmente”. 

En contraste, dijo, en otras regiones del norte del país, la capacidad energética puede no ser suficiente para abastecer la creciente demanda de la industria, lo que podría obstaculizar el potencial de crecimiento económico y la atracción de inversiones en esas áreas.

“Un claro ejemplo de cómo esta mejora en la capacidad eléctrica está impulsando el desarrollo industrial es la instalación de grandes empresas como Walmart, Heineken.  Estas empresas, conscientes de la importancia de contar con una infraestructura eléctrica confiable, han optado por establecerse en Yucatán para aprovechar sus beneficios logísticos y energéticos”, comentó.

Heineken
Fotoarte: Fernando Ramirez

Tren Maya, el impulso

De acuerdo con Grupo Libera, el proyecto del Tren Maya no solo promete transformar el turismo y la conectividad en la región de la Península de Yucatán, sino que también ofrece beneficios significativos para el sector industrial y el fenómeno del nearshoring en México.

Una de las ventajas clave del Tren Maya, reitera la firma, para el sector industrial es su capacidad para mejorar la logística y el transporte de mercancías en la región.

Al proporcionar una infraestructura ferroviaria moderna y eficiente, el tren facilitará el movimiento de materias primas, productos manufacturados y componentes industriales entre las diferentes ciudades y parques industriales a lo largo de su ruta y con Puerto Progreso, así como la costa de Estados Unidos.

“El Tren Maya ofrecerá oportunidades para el nearshoring, que es el traslado de operaciones y procesos industriales de países lejanos”, dijo. 

Tren Maya
Fotoarte: Andrea Velázquez

El tren ha detonado el desarrollo de parques industriales y zonas económicas a lo largo de la ruta y ello impulsará la creación de clusters industriales y ecosistemas de innovación en la región. 

Empresas chinas y españolas las más interesadas

Edoardo Tray informó que, a partir de un análisis, identificaron el origen de las empresas interesadas en invertir en la Península. Del total, el 70% de las inversiones provienen del extranjero, encabezado por chinas, españolas, sudafricanas y estadounidenses por último.

La zona se está volviendo más competitiva por los precios, ya que el costo está en un máximo de 2,000 pesos  el metro cuadrado industrial de tierra yucateca.

Mientras que en estados como Nuevo León, en donde está Tesla, el precio supera los 15,000 pesos llegando hasta los 20,000 pesos, en Guadalajara y Querétaro los 12,000 pesos.

Retos de infraestructura

Sin embargo, no todo el panorama es positivo para Yucatán, la entidad enfrenta importantes desafíos en su infraestructura pública, según indica la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) local.

Por ejemplo, destaca la necesidad de mejorar la conectividad interna mediante la expansión de caminos y carreteras, así como el fortalecimiento de la infraestructura energética para reducir la frecuencia de los apagones, actualmente este estado tiene la tasa más alta del país.

Canacintra también resalta la urgencia de garantizar el suministro de gas natural y realizar inversiones en infraestructura de alta tensión.

Además, menciona la importancia de reducir los costos energéticos, ya que Yucatán presenta una de las tarifas eléctricas más elevadas, especialmente en la categoría de media y media tensión, que pueden llegar a ser hasta un 15% más altas que en otras regiones.

En cuanto a la inversión pública local, Moody’s señaló que Yucatán fue uno de los estados con menor gasto de capital en el 2022, representando solo el 1.3% del gasto total.

A pesar de tener margen para adquirir deuda según la Ley de Disciplina Financiera (LDF) de las Entidades Federativas y los Municipios, que permite hasta el 15% de los ingresos anuales para inversión pública, el estado aún no ha aprovechado completamente esta capacidad.

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