Como se sabe la Secretaría de Hacienda intentará de nueva cuenta promover diversos cambios regulatorios para incentivar el financiamiento bursátil, uno de los primeros objetivos de la actual administración que poco avanzó por culpa de los cambios de titular de la dependencia y los constantes ajustes del timón de la CNBV. 

Las modificaciones pretendidas buscan simplificar el proceso y requisitos para emisiones de deuda de empresas medianas cuyos bonos estarán dirigidos exclusivamente para los llamados inversionistas institucionales que tienen un mayor conocimiento del riesgo implícito. 

Además, para el mercado de capitales se propone regresar a las diversas modalidades de series accionarias que servirían para atraer nuevas emisoras o las ofertas subsecuentes, sin necesidad de que el grupo mayoritario se diluya o arriesgue el control.

La prolongada ausencia de nuevas ofertas accionarias y la escandalosa salida de 15 emisoras en lo que va de la administración de Andrés Manuel López Obrador, es una preocupación más para los equipos de Hacienda, pero es poco probable que los cambios, que deberían de anunciarse este mes, resuelvan el grave y multifactorial problema que enfrenta el financiamiento bursátil accionario en México, y que poco pudo hacer para enderezar el rumbo la reforma de 2018.

 

Mientras esto sucede, la Secretaría de Hacienda ya comenzó a coordinar una gran campaña de educación y promoción del mercado accionario cuyo gasto deberán de absorber todos los participantes, para empezar, estarán tanto la BMV como BIVA, Amafore, AMIB, y Condusef, principalmente, pero el objetivo real es simplemente ganar un poco de tiempo y responder a las presiones de todo el mercado para esperar quizá hasta la siguiente administración para intentar nuevamente dotar de dinamismo a los mercados antes de que la intermediación termine por abandonar México.

En espera

Ya habíamos comentado en este espacio la sigilosa salida de Carlos Rojo Macedo del Grupo Financiero Banorte donde como último puesto fungió como Asesor de la Presidencia, pero nos cuentan que el experimentado banquero goza de un prolongado periodo sabático en la ciudad de San Diego, y que ya está en la lista de ejecutivos encargados del proceso de integración de Banamex, claro siempre y cuando el ‘banco fuerte de México’ sea el elegido para hacerse del control del icónico banco. 

Se sabe de su experiencia en este tipo de procesos cuando Banorte fusionó a Interacciones, y así como su trayectoria en el negocio de préstamos a Estados y municipios, donde la mancuerna que por muchos años tuvo con Tamara Caballero en Interacciones podría repetirse con la fusión.