Tras la salida de Javier Jiménez Espriú como titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el cargo lo asumirá el ingeniero civil Jorge Arganis Díaz Leal, quien fuera colaborador de ICA durante al menos 20 años, con lo que la constructora afianza su cercanía con la nueva administración.

De acuerdo con la información de la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles (ASCE por sus siglas en inglés), Díaz Leal colaboró con ICA de 1977 a 1997 como coordinador de Promoción de la división de Operación Internacional; secretario particular de, Bernardo Quintana Arrioja, fundador y entonces presidente; gerente de Desarrollo de Negocios de la división de Construcción Industrial; director de Desarrollo de Negocios del Sector Construcción y director general de Proyectos Especiales.

Posteriormente, Leal se desempeñó como director general de Obras Públicas de 2002 a 2006, como Secretario en la Secretaría de Obras y Servicios del Gobierno del Distrito Federal de 2006 al 2009 y como asesor en la misma dependencia del 2009 al 2018, de acuerdo con la información contenida en la plataforma DeclaraNet.

En dicha información actualizada en febrero del 2019, se hace constar que el funcionario no aceptó hacer públicos sus datos patrimoniales e incluye “no estoy de acuerdo en hacer público mi posible conflicto de interés” señala el documento.

ICA en el gobierno

Dirigida actualmente por Guadalupe Phillips, la empresa figura entre los primeros ganadores para reconvertir el terreno que dejó la cancelación de la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, un proyecto liderado por la Comisión Nacional del Agua para la recuperación del Lago Nabor Carrillo en Texcoco.

La Conagua falló en junio a favor de la constructora para otorgarle un contrato por 121.6 millones de pesos, procedimiento que consiste en la nivelación del terreno y la construcción de un vivero.

La empresa también se quedó con el cuatro tramo del Tren Maya sin necesidad de licitación, pues actualmente posee la concesión de operación de 241 kilómetros de la autopista Kantunil-Cancún, de los cuales 218 kilómetros son necesarios para el tren.

La empresa obtuvo el título de concesión el 5 de diciembre de 1990 tras ganar un proceso de licitación para la construcción y operación del tramo. El acuerdo inicial era que ICA operaría el tramo por los próximos 17 años con el pago de 0.5% de los ingresos a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes por concepto de contraprestación.

Cuatro años después solicitó una modificación para ampliar el periodo de operación por 30 años contando a partir de 1990, cambio que le fue autorizado, en 2009 la empresa solicitó autorización para la construcción y explotación de dos tramos carreteros aledaños que suman 60.5 kilómetros, además de la ampliación de la operación los 300 kilómetros por 30 años más, lo cual le fue autorizado manteniendo el 0.5% de ingresos por concepto de contraprestación, con lo cual la empresa tiene derecho a operar el tramo hasta el año 2050.

En diciembre de 2019 obtuvo otro contrato con Banobras por medio de licitación pública, trabajos que consisten en la rehabilitación del pavimento mediante losas de concreto hidráulico de la autopista Palmillas-Querétaro.

De acuerdo con la información de la plataforma de compras Compranet, el contrato concluye en diciembre del 2020 y es por un monto de 269.8 millones de pesos.