En la Ciudad de México y en otras 99 ciudades de mayor población en el país existen figuras que se encargan de verificar la seguridad de las construcciones. Se les conoce como Directores Responsables de Obra (DRO), Corresponsables en Seguridad Estructural (CSC) y Corresponsables en Diseño Urbano y Arquitectónico (CDUyA).
Estos especialistas en ingeniería, arquitectura o estructuras son auxiliares de la administración que avalan la calidad de las construcciones mayores a 30 metros de altura o con más de 6,000 metros cuadrados.
Tonatiu Balanzario, quien ejerce como DRO, comenta que esta figura existe desde 1942. Cuarenta y tres años después, en 1985 había registrados alrededor de 8,000 expertos, aunque no todos se encontraban en funciones.
Hoy existen alrededor de 2,928 especialistas registrados ante la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano de la Ciudad de México, de los cuales los activos son alrededor del 35.6%, según cifras del Instituto para la seguridad en las Construcciones en la Ciudad de México.
El subdirector de Control de DROs del Instituto para la seguridad en las Construcciones en la Ciudad de México, Javier Alejandre Melgarejo explicó que el número varía, ya que se tiene que revalidar la constancia de manera periódica.
Para ello, según explica Balanzario, se deben hacer peticiones por escrito a la Comisión de Admisión de Directores Responsables de Obra y acreditar un mínimo de 30 horas de capacitación.
Las responsabilidades de estos especialistas varían según la materia. Balanzario explica que el Corresponsable de Seguridad Estructural es el encargado de revisar temas referentes a la seguridad en la construcción, además de temas de ingeniería, sistemas pluviales, instalación eléctrica, redes, seguridad, sistemas contra incendios y elevadores.
El corresponsable en Diseño Urbano y arquitectónico vigila que la construcción cumpla con toda la normatividad y se protejan los sitios patrimoniales e históricos.
El Director Responsable de Obra es quien coordina la revisión, “pero consulta a los corresponsables. Todos tenemos la misma responsabilidad” comenta el ingeniero.
El trabajo comienza previo a la construcción: los corresponsables revisan el proyecto, realizan observaciones a los planos y vigilan que se hagan los arreglos pertinentes.
Cuando consideran que el plan es completamente seguro y se encuentra bajo la norma, firman el dictamen correspondiente para que obtenga la licencia de construcción.
Primero revisa el proyecto y hace un listado de observaciones que envía al propietario o empresa constructora. Ellos corrigen. Después se vuelve a validar y si ya esta correcto, se firma para el trámite de licencia de construcción.
Las construcciones no deberían fallar
Balanzario fue Corresponsable de Diseño Urbano y Arquitectónico de Torre Mayor y Torre Diana en la Ciudad de México. En su opinión, “no se debería caer ninguna construcción”, ya que las medidas permiten que en caso de siniestros, las edificaciones puedan ser restauradas.
Consideran que la regulación de la Ciudad se encuentra entre las más estrictas del mundo, a la par de ciudades como Japón, Chile o Nueva Zelanda. Lo que falla es la aplicación.
El ingeniero explicó que cuando las obras son inseguras o violatorias de la norma se debe, en ocasiones, a falta de ética de los corresponsables, a la premura en el proceso de construcción o a que los corresponsables tienen más edificaciones de las que pueden revisar.
“Cuando inicia la construcción voy a la obra una vez a la semana, hacemos reuniones entre propietarios, supervisores y corresponsables. En ese momento yo realizo observaciones para que se corrijan y se lleva un bitácora de la construcción”.
El experto tiene en revisión actualmente, 15 proyectos aunque señala que hay quienes llegan a tener de manera simultánea hasta 300.
“La gente está acostumbrada a contratar a quien menos cobre. Eso pone en riesgo la integridad de profesionistas. Es mucha la responsabilidad.”
En muchas ocasiones, agrega, la gente hace modificaciones una vez que ya tiene habitados los proyectos. Quitan muros, hace puertas, quitan castillos, cambian los usos. “Pero una vez que ya está ocupado el predio, el dueño ya no consulta ni informa al DRO. En ese caso ya no es su responsabilidad, pero aun así es a quien citan en primera instancia si algo falla”.
Durante el sismo del 19 septiembre, Balanzario fue parte de las brigadas de dictaminación de daño de los inmuebles; en el proceso observó que las construcciones de dimensiones menores que se hacen sin vigilancia ni acompañamiento técnico son las más vulnerables.
Comentó que recibieron más de 7,000 solicitudes de revisión y el 80% de las que sufrieron daños totales eran de esas características.
Sanciones en pausa
Cuando alguna construcción falla, dependiendo de los resultados que arrojen los dictámenes elaborados por los peritos, la responsabilidad se le finca a los corresponsables de obra, así como a los propietarios.
Si las edificaciones contienen violaciones a la Ley de Desarrollo Urbano Vigente, las sanciones aplicables son rescisión o suspensión de convenios, clausura parcial o total de la obra, demolición o retiro parcial o total, intervención administrativa a las empresas, revocación del registro de las manifestaciones y de las licencias o permisos otorgados.
El subdirector de Control de DROs explicó que para el caso de los Corresponsales de Obra y DROs las sanciones pueden ir desde multas y suspensión temporal del registro hasta baja definitiva del padrón.
De acuerdo con el directivo, en caso de existir víctimas o lesionados las sanciones administrativas son independientes de sanciones de corte penal.
Alejandre Melgarejo destacó que la SEDUVI hasta el momento reporta únicamente cuatro DROs sancionados y ningún corresponsal.
Explicó que actualmente el proceso está detenido dado que se está reformando reglamento para las construcciones, sin embargo cuando EL CEO buscó a trabajadores de la dependencia para dar seguimiento a la propuesta de reforma, comentaron no tener conocimiento de ésta, argumentando la suspensión al cambio de administración en la CDMX.
El ingeniero Melgarejo añadió: “Claro que esto no quiere decir que ya se hayan salvado, sino hasta que se reactive el artículo se retomarán los casos y se harán acreedores a las sanciones”.
El directivo también explicó que tanto ellos como la Seduvi únicamente responden o acuden a edificaciones que hayan sido denunciadas por vecinos.