Una de las principales promesas del Tren Maya es el crecimiento económico que generará en la región del sureste del país. La llegada de megaproyectos como estos impactan en más de un modo dentro de las comunidades en las que se asientan; por ejemplo, dentro del tejido social o la expansión de la marcha urbana.

En el caso del Tren Maya, instituciones como la ONU Hábitat han hecho estimaciones de lo que demográficamente y términos de turismo va representar la llegada del proyecto a los distintos municipios.

ONU Habitat y Fonatur elaboraron el “Sistema de evaluación exante de los impactos generados por la estrategia de desarrollo integral de la región sureste” el cual contiene una serie de proyecciones sobre el impacto en población, uso de suelo y turismo, entre otros, que tendrá el Tren Maya tras su construcción.

Turismo y vivienda

El Fonatur estima que, para 2025, la demanda turística aumentará en cuatro millones.

Desde el punto de vista de la expansión territorial se espera que municipios como Conkal, Motul, Progreso y Hunucmá, alrededor de Mérida, incrementen su población, así como Escárcega, en Campeche, y Tenosique, en Tabasco, en un rango de 50 kilómetros alrededor de las estaciones planeadas del tren.

A partir de esto y del estimado en demanda turística, se elaboró una proyección del crecimiento en vivienda a 2030 con Ciudad del Carmen a la cabeza con un crecimiento de 28.9%, luego Cancún con 27.7% y Mérida con 29.6 % decrecimiento en viviendas.

Chiapas, el primer intervenido

El Fonatur ya inició las licitaciones para las estaciones, y algunas para controlar el crecimiento territorial. La primera de ellas es la de Chiapas.

De acuerdo con el estudio conjunto, con el impacto del Tren Maya, para el 2030 la población de este estado será de casi 6.93 millones de habitantes, es decir, un incremento del 6.4 %.

En cuanto a la vivienda, se espera que se adicionen alrededor de 107,700 unidades “por el impacto del proyecto del tren”.

El Fonatur lanzó la convocatoria para la elaboración del plan parcial de desarrollo urbano del área de influencia del Tren Maya, en Palenque, Chiapas, cuyo fallo ocurrirá el 9 de junio, ya que parte de los beneficios que traerá el proyecto se relacionan con el reordenamiento territorial.

La información contenida en Compranet expone que en el procedimiento participan cuatro empresas: Berek Construcciones, Local & Global Ideas, CDUA Consultoría en Desarrollo Urbano y Ambiental, y PPI Proyectos y Planeación Integral, con propuestas económicas que no sobrepasan 1.6 millones de pesos.

El objetivo es que la empresa seleccionada defina un plan para la conservación, mejoramiento y crecimiento de los asentamientos urbanos y establezca una zonificación, así como identificar los mecanismos regulatorios que permitan el desarrollo de proyectos acorde con los programas parcial y la normatividad estatal y municipal.

La especialista Giovanna Gasparello, antropóloga e investigadora, publicó en 2019 un cuaderno de investigación sobre el impacto que podría tener el Tren Maya en Palenque en el que señaló riesgos asociados a que no se desarrollen verdaderos proyectos comunitarios de promoción y hospedaje.

En tanto, desde el punto de vista territorial, considera que basado en la experiencia del
Centro Integralmente Planeado Palenque-Agua Azul que lanzó Finatur en la demarcación en el año 2000, estas grandes iniciativas podrían dejar en condiciones de vulnerabilidad a las comunidades

“La implementación del megaproyecto Tren Maya en el contexto estudiado podría ahondar
la brecha de exclusión y desigualdad, profundizar la violación a los derechos individuales y colectivos de la población indígena, así como incrementar la conflictividad y las distintas violencias que ya afectan la sociedad en la región”.