La industria de la construcción es responsable de un alto porcentaje de emisiones de carbono al ambiente sin embargo, busca disminuir su huella con edificaciones que reduzcan sus emisiones a cero.

El Informe 2020 de Estado Global de Edificios y Construcción reveló que a lo largo del año la operación de los edificios construidos consumió el 35% de la energía global total, mientras que las emisiones de dióxido de carbono, compuesto asociado al calentamiento global, ascendieron al 38% del total.

Este porcentaje representa una disminución en comparación con el 39% registrado en 2019, sin embargo el informe explica que no se debió a una reducción de la emisión por parte de la industria, si no que otras ramas de la economía generan más emisiones durante el año.

El documento es elaborado de manera anual por el Programa para el Medio Ambiente de la ONU en conjunto con la Alianza Global para la Edificación y la Construcción, una organización internacional enfocada en reducir las emisiones de la industria integrada por 130 miembros, incluidos 29 países (entre ellos México).

De acuerdo con su información, para que la industria logre el objetivo de reducir a cero su emisión de carbono para el 2050 todos los actores de la cadena deben quintuplicar sus acciones. Hasta el momento se ha avanzado en desarrollar y adaptar algunos inmuebles que ya alcanzan la certificación LEED Zero emisiones, de acuerdo con el USGBC.

La certificación LEED Zero se otorga a inmuebles según cuatro categorías: carbono, energía, agua y residuos. Desde el lanzamiento del programa, 15 proyectos en todo el mundo han obtenido certificaciones. Estos son algunos ejemplos.

Sede Petinelli

El primer inmueble en obtener la certificación LEED Zero energy fue la sede de la consultora brasileña Petinelli, que se especializa en ingeniería y construcción ecológica. Se encuentra en Curitiba, la capital de Paraná, en Brasil.

Se trata de un almacén reconvertido en un edificio de oficinas de 440 metros cuadrados. De acuerdo con USGBC, toda la energía se produce en el sitio, con una intensidad de uso de solo 25 kilovatios hora por metro cuadrado durante un año, esto es equivalente al consumo mínimo mensual de la tarifa doméstica de CFE. Al interior del edificio se encuentra una matriz fotovoltaica que proporciona alrededor del 125% de la energía necesaria para hacer funcionar la oficina de 25 personas.

En los próximos meses buscarán certificarse en consumo de agua ya que gracias a sistemas de captación la oficina ha estado fuera de la red de agua pública durante casi dos años.

Oficinas Eurobusiness

En 2019, las oficinas de Eurobusiness obtuvieron la certificación LEED Zero agua. De la reconversión de este inmueble se encargó la consultora Petinelli. En 2016, obtuvieron la certificación LEED Platinum.

El edificio también ubicado en Curitiba cuenta con 14 pisos y trata el 100% de sus aguas residuales (tanto grises como negras) en el lugar. Para ello construyeron un humedal que capta el agua de lluvia en el techo. De forma convencional, estos sistemas se instalan en el suelo, y regularmente ocuparían dos lugares de estacionamiento, sin embargo para liberar esos espacios lo instalaron en la azotea.

Ahora un cuerpo de agua cubre el techo, tiene un piso elevado cubierto con grava y plantas acuáticas. El humedal es parte del sistema de tratamiento de las aguas residuales, que se utilizan para la descarga de inodoros o se infiltran en el sitio y destacan que no se utilizan productos químicos en el proceso de tratamiento. De acuerdo con sus mediciones, logran recuperar el 65% de toda el agua utilizada.

Colgate-Palmolive, Nueva Jersey

Este inmueble ubicado en Burlington, Nueva Jersey, fue el primero en obtener certificación en todas las categorías: agua, energía, carbono y residuos. La de residuos es la más reciente.

De acuerdo con su información para obtener la certificación en residuos tuvieron que involucrar a los miembros de la organización, por lo que desde el 2017 comenzaron con protocolos para los empleados enfocados en reciclar, reutilizar, reducir deshechos.

Para el final del 2019, año en que recibió la certificación alcanzó a reducir alrededor del 53% de los residuos dirigidos a vertederos. Para el 2020 evitaron desechar en vertederos el 90% de sus residuos.