El United Auto Workers (UAW) lanzó una iniciativa, la primera de su tipo, para organizar a todos los trabajadores del sector automotriz no sindicalizado, después de ganar nuevos contratos con los tres fabricantes de automóviles de Detroit.
El UAW, con sede en la ciudad estadounidense, mencionó que los trabajadores de 13 fabricantes automotrices no sindicalizados anunciarán campañas simultáneas en Estados Unidos para unirse a la organización, incluso en fábricas de Tesla, Toyota, Volkswagen, Hyundai, Nissan, BMW y Mercedes-Benz.
Estas automotrices dan empleo a casi 150,000 trabajadores en sus plantas de ensamblaje en territorio estadounidenses, aproximadamente el mismo número de trabajadores en las compañías de Detroit —General Motors, Ford y Stellantis—, con las que el UAW firmó nuevos contratos laborales.
El presidente del sindicato, Shawn Fain, dijo que es momento de que los trabajadores del sector automotriz que trabajan sin sindicato busquen nuevos beneficios y aseguró que no deben preocuparse por cómo van a pagar el alquiler o la alimentación de sus familias mientras las empresa ganan miles de millones.
Los acuerdo del organismo con los tres grandes de Detroit incluyeron un aumento salarial del 25% hasta 2028, redujo el tiempo para alcanzar el incremento en el salario de ocho a tres años, incrementó la paga de los trabajadores temporales en 150% y los convirtió en empleados permanentes.
Estrategia del UAW
El sindicato detalló que su estrategia de organización se centra en que si el 30% de los trabajadores de una planta no sindicalizada firman tarjetas para afiliarse a la organización, harían pública la petición.
Por otro lado, si el 50% de los empleados quieren afiliarse, el UAW celebraría una reunión con Fain para promocionar la iniciativa. Con el 70% y un comité organizado, el sindicato estableció que buscaría el reconocimiento o exigiría una votación de representación sindical.
La iniciativa se produce cuando diferentes fabricantes automotrices extranjeros han comunicado a sus empleados mejoras salariales y algunas nuevas compensaciones en respuesta a los contratos conseguidos por el UAW.
Muchos analistas consideran que estas medidas adoptadas por las compañías son un esfuerzo de los fabricantes de autos para mantener al UAW fuera de sus plantas.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, respaldó este mes al sindicato en su intento por sindicalizar a otros fabricantes de autos.
Quiero este tipo de contrato para todos los trabajadores del sector automovilístico y tengo la sensación de que el UAW tiene un plan para ello
aseguró Biden en un evento con el líder sindical Fain.
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Con información de Reuters