Los precios del petróleo marcaron este miércoles su mayor ganancia semestral desde 2009, de acuerdo con Bloomberg, gracias a que en los primeros meses del año las mayores economías del mundo se recuperaron, lo que dio un impulso a la demanda de combustibles.
El crudo Brent para agosto, que expiró en la jornada, ganó 37 centavos, o 0.49%, a 75.13 dólares el barril, y el contrato para septiembre avanzó 34 centavos, a 74.62 dólares. El West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) sumó 49 centavos, o 0.67%, a 73.47 dólares el barril.
Tanto el Brent como el WTI se ubican justo por debajo de máximos tocados por última vez en 2018, y se apuntaron su séptima ganancia mensual de los ocho últimos meses. El WTI escaló más de 10% en junio, mientras que el Brent ascendió más de 8%.
Si bien la variante del Delta del COVID-19 se propaga en muchos países, provocando nuevos confinamientos y restricciones a la movilidad en países como Australia y Portugal, las esperanzas de una recuperación más amplia de la demanda de combustible permanecen intactas.
Los futuros se han estado cotizando en un solo sentido al alza desde el titular del 2 de noviembre que declaraba que se había desarrollado una vacuna COVID-19
dijo Bob Yawger, director de futuros de energía de Mizuho Securities
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Las esperanzas de una recuperación acelerada recibieron un impulso de Mohammad Barkindo, secretario general de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), quien dijo el martes que se espera que la demanda aumente en seis millones de barriles por día en 2021.
Goldman Sachs pronostica que la demanda aumentará en otros 2.2 millones de barriles diarios para finales del año, dejando un déficit de oferta de cinco millones de barriles por día.
“Si bien una gran ola de nuevas infecciones podría desacelerar el equilibrio del mercado, esperamos que OPEP+ siga siendo táctica en sus aumentos de producción, con riesgos a la baja para el suministro global en otros lugares que apuntan a una perspectiva más sólida para el crudo y el sector de exploración y extracción que para los productos del petróleo y el sector de refinación y distribución”, dijo Goldman.
Los ministros de la OPEP y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, se reunirán el jueves para decidir su política de bombeo a partir de agosto.
En tanto, los inventarios petroleros en Estados Unidos bajaron por sexta semana consecutiva a medida que las refinerías aumentaron la producción en respuesta a una mayor demanda, reportó este miércoles la Administración de Información de Energía (EIA).
Las existencias en Cushing, Oklahoma, punto de entrega del contrato WTI, descendieron a su menor nivel desde marzo de 2020, según la EIA.
Con información de Reuters
