La Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac) pone sus propuestas sobre la mesa del gobierno de Ciudad de México para seguir a flote.
La prohibición de comercializar, distribuir y entregar bolsas de plástico desechables en la capital del país a partir de este año orilló a la industria a proponer medidas menos severas y la acción en conjunto con las autoridades para buscar una solución al problema de la disposición final de los desechos sólidos.
Entre algunos de sus puntos se encuentra se encuentra el cambio del modelo económico actual en el que se promueve el uso único de las bolsas de plástico.
Nuestra petición es reunirnos con las autoridades para llegar a una regulación sobre el tema. En esta pensamos proponer que la composición de la bolsa sea de entre 20 al 50% de material reciclado, de un material más grueso para aguantar hasta 100 usos
Raúl Mendoza, director general de Anipac
Otro esfuerzo que proponen con las autoridades locales es invertir en tecnología para aumentar la recolección de plástico para así reciclarlo, además de urgir expandir el tiempo para poner en marcha dicha medida a un año.
“En este caso se inició con una norma para prohibir su uso, en lugar de que se llevara a cabo primero es un trabajo técnico para llegar a una regulación con especificaciones”, comentó Mendoza.
De acuerdo a datos de la Anipac, la participación que tienen las bolsas de plástico en el total de residuos sólidos en los tiraderos de Ciudad de México y su zona conurbada, apenas el 1% son bolsas de plástico a diferencia del 60%, que son desperdicios orgánicos.
La capital del país representaba uno de sus principales mercados para la industria de las bolsas de plástico, con un 30% del total de las empresas que conforman a la asociación asentadas en la región.
Otros mercados importantes para el gremio son los estados de Jalisco, Nuevo León y el de México.
Bolsas de mandado no reactivarán la industria
La producción de las típicas bolsas de mandado que se utilizaban para poner las compras que se realizaban en los diferentes mercados de la ciudad no ayudarían a reactivar a la industria, después de la prohibición de las desechables.
Las conocidas como bolsas de mandado realizadas de malla o tejida de plástico fueron populares durante algún tiempo entre las familias mexicanas, pero fueron sustituidas por las bolsas de polietileno más delgadas.
“Aunque estas bolsas tienen una oportunidad importante de volver a posicionarse en el gusto del público, no podrían llenar el hueco que significa la prohibición de las bolsas desechables”, comentó el directivo de la Anipac.