No sólo es Apple, Samsung también recorta sus ganancias trimestrales.
El número uno mundial de los smartphones, el surcoreano Samsung, prevé una fuerte caída de sus ganancias en el cuarto trimestre del año, por primera vez en dos años, debido a la dura competencia china y la caída del precio de los chips de memoria.
El primer fabricante mundial de teléfonos y chips de memoria obtuvo en los últimos años resultados récord a pesar de problemas como la retirada del mercado de uno de sus teléfonos estrella -el Galaxy Note 7- porque su batería explotaba y la condena a prisión del heredero del imperio, Lee Jae-yong, quien se vio inmerso en un escándalo de corrupción que implicaba a la entonces presidenta, Park Geun-hye.
El beneficio operativo del último trimestre de 2018 debería situarse en unos 10.8 billones de wones (unos 9,600 millones de dólares), es decir, 28% menos que un año antes, detalló el grupo en un comunicado, alegando una “demanda más débil de la prevista”.
Las malas previsiones de Samsung llegan a pocos días de la advertencia de su gran rival estadounidense Apple, que informó que sus ingresos trimestrales caerían en el primer trimestre de 2019 a causa de la “subida de tensiones comerciales” entre China y Estados Unidos.
Un día después, las acciones de Apple cayeron casi 10% en Nueva York y arrastraron a las bolsas a la baja.
A pesar de la reducción de los márgenes en su sector de smartphones, Samsung Electronics había logrado hasta ahora mantener sus beneficios gracias a sus chips de memoria, los cuales sirven para sus propios teléfonos, pero también para los de la competencia, como Apple.
Sin embargo, en los próximos meses el panorama es sombrío por “la débil demanda en el sector de los chips y la exacerbada competencia en el sector de los teléfonos”, explicó el grupo.
Con 20% de cuota de mercado, Samsung domina el mercado mundial de los smartphones, pero se enfrenta a rivales chinos como Huawei, que le arrebató a Apple su segundo lugar en el podio mundial.
“Samsung pierde terreno frente a Huawei, Xiaomi y otros rivales chinos en los grandes mercados chino e indio”, dijo Neil Mawston, un analista de Strategy Analytics.
Samsung llegó a tener el 20% del mercado de teléfonos chino, el mayor del mundo, pero sus ventas cayeron a menos del 1% en el tercer trimestre. Samsung anunció el mes pasado el cierre de su fábrica china de Tianjin.
En general, los analistas calculan que las ganancias de Samsung disminuirán hasta 2019, con una desaceleración de la economía china que erosiona la demanda.
“Esperamos que las ganancias se mantengan moderadas en el primer trimestre del 2019 debido a las difíciles condiciones para el negocio de chips de memoria”, explicó la firma.
Samsung revelará sus ganancias detalladas a fines de enero.
Con información de Reuters y AFP