Más del 37% de lo que se produce cada año en el país se desperdicia, mientras que 28 millones de mexicanos pasan hambre o no satisfacen sus necesidades alimentarias, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). 

En este contexto de desperdicio, Olio, aplicación originaria de Reino Unido, llegó a México el pasado abril para incentivar a que la comunidad tome conciencia y decida compartir, sin costo alguno, comida u objetos en vez de tirarlos. 

Todo en Olio es gratuito porque no toma ninguna comisión y nadie puede vender ni intercambiar. Tenemos la filosofía de que en algunos momentos de tu vida te toca compartir y en otros te toca recibir. Así que puede solicitar cuanto quieran y compartir cuanto quiera

Cecilia Migueltorena, representante de Olio en México

A nivel mundial, ya son más de 1 millón de usuarios quienes han realizado más de 1.7 millones de intercambios de productos. En México suman 80,000 usuarios.

¿Cómo funciona?

La app funciona bajo dos ejes: uno es destino a destino tanto para comida como para artículos. Si una persona tiene algo en su casa le toma foto, lo sube para que cualquier otra persona cerca pueda contactarla por medio de la app y acuerdan  horario y punto de recolección. 

Otra manera de funcionar es mediante el programa de heroes recolectores de alimentos, lo cual implica que Olio se vincule con restaurantes y asigna a voluntarios, capacitados en manejo de alimentos, para que pasen a recolectar los alimentos que los restaurantes interesados en compartir. Se los llevan a su casa, los refrigeran y los suben a la app para encontrarse con personas para entregarlos. 

Esto lo hacemos al firmar un acuerdo de compromiso donde cada uno se responsabiliza de que su personal ha manejado los alimentos de manera adecuada de acuerdo a las leyes de Cofepris. Olio lo firma para garantizar que nuestros voluntarios han sido capacitados. y así garantizar que llegue en buen estado

 Cecilia Migueltorena

Migueltorena explica que la comida recolectada se entrega muy rápido, además de que los voluntarios tienen un máximo de 24 horas para compartir los alimentos. Cerca del 95% de los artículos salen de manera exitosa.

Por ahora tienen acuerdo con 15 restaurantes y  uno de esos, Coperaco, tiene 11 sucursales y está en las cocinas de We Works. Algunos de los otras resturantes son Gastrolab, que es un programa de cocina del Heraldo de México; Café Forte,  una panadería de la Colonia Roma; Lunch Garden, y Maquech Púrpura, un restaurante yucateco en la Colonia Narvarte. 

Los ingresos para Olio son gracias a este programa, ya que tiene un costo para los restaurantes cuando cuentan con más de 13 sucursales, es decir, cuando comienza a generar un costo para la aplicación recolectar y mover los alimentos. Así es como obtienen una ganancia y se mantienen operando. 

Demanda de usuarios mexicanos aún no es la comida

En México, a diferencia de otros país donde opera Olio, 80% de los usuarios la utilizan para compartir artículos y no comida. 

Migueltorena considera que esto podría ser debido a que existe desconfianza a las instituciones cuando se realizan donaciones de alimentos. 

Tenemos ciertas hipótesis de esto. Muchas veces no se confía en las instituciones a donde se quieren donar cosas. Lo que facilita esta aplicación es que sabes a quién se lo vas a entregar físicamente en sus manos

Filtros de seguridad

Olio cuenta con algunos filtros de seguridad como el verificar el móvil al bajar la aplicación y activar la geoubicación de usuarios.

También hay que llenar un perfil para que otros usuarios tengan acceso a él y puedan sentirse seguros de con quien comparten y manejan un sistema de puntuación para que al finalizar una recolección califiquen en cuanto a responsabilidad y puntualidad.

En caso de identificar mal uso de la app,  se reporta y notifica al usuario para que cambien su comportamiento.