La autoridad francesa de protección de datos infligió una multa récord de 50 millones de euros a Google por no haber informado claramente a sus usuarios sobre el uso de sus datos personales.

La Comisión Nacional de Informática y libertades (CNIL) es la primera instancia europea de regulación en sancionar a una plataforma mundial de internet sobre la base del nuevo reglamento general de protección de datos (RGPD), que entró en vigor el pasado 25 de mayo.

Esta regulación europea prevé sanciones de hasta 4% del volumen de negocio total anual global por incumplimento de la obligación de proteger los datos personales de los ciudadanos europeos.

“No negamos que Google informe” a sus usuarios sobre el uso de sus datos personales, dijo el director de la protección de los derechos y de las sanciones de la CNIL, Mathias Moulinm. “Pero la información no es fácilmente accesible y está diseminada en diferentes documentos”.

“A veces se necesitan cinco clics para acceder a una información”, añadió, por lo que concluye que Google no propone una información “clara y comprensible”.

La CNIL tomó esta sanción tras recibir quejas colectivas de dos asociaciones en mayo del año pasado, poco después de la entrada en vigor de la directiva europea.

Una fue presentada en nombre de unos 10,000 firmantes por la asociación francesa Quadrature du Net, mientras que la otra fue presentada por None Of Your Business, creada por el activista austriaco Max Schrems.

Schrems había acusado a Google de obtener el “consentimiento forzado” mediante el uso de casillas emergentes en línea o en sus aplicaciones.

Alistan impuestos para grandes tecnológicas

Además de las preocupaciones sobre la privacidad, el gobierno francés se prepara para presentar un proyecto de ley para crear una tasa a las grandes tecnológicas conocidas como GAFA (Google, Amazon, Facebook y Apple) aplicable “desde este año”, anunció este domingo el ministro de Economía, Bruno Le Maire.

El proyecto “será sometido rápidamente al voto del Parlamento”, indicó Le Maire en una entrevista con el diario Journal du Dimanche, precisando que el impuesto que afectará a las empresas que ofrezcan servicios digitales “que representen un volumen de negocio superior a 750 millones de euros a nivel mundial y 25 millones de euros en Francia”.

“Si no se cumplen esos dos criterios, no serán tasadas”, precisó.

“La tasa será aplicable a partir del 1 de enero de 2019 y su índice se modulará en función del volumen de negocio, con un máximo de 5%. Debería reportar unos 500 millones de euros (de recaudación)”, explicó.

El cobro de impuestos a los servicios digitales y, principalmente, a los GAFA es un importante desafío del siglo 21 y una “cuestión de justicia y eficacia”, consideró el ministro.

Aunque Francia decidió actuar sin esperar a un consenso a nivel europeo, Le Maire apuntó que un acuerdo de este tipo seguía siendo posible “antes de fines de marzo” y destacó el apoyo de Francia a una propuesta europea presentada por el Comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici.

“Quedan algunos países que dudan. Hicimos una oferta de compromiso en diciembre con Alemania y estoy convencido de que se puede alcanzar un acuerdo antes de fines de marzo. A unos meses de las elecciones europeas, nuestros ciudadanos no comprenderían que renunciemos”, señaló.

Irlanda, Dinamarca y Suecia se opusieron claramente a una tasa del 3% del volumen de negocio a los gigantes del sector digital. Alemania tampoco la veía con buenos ojos, por temor a medidas de retorsión estadounidense contra su industria automovilística.

Otros países tomaron medidas similares a nivel nacional, como Reino Unido y Singapur.

En España, el gobierno del socialista Pedro Sánchez aprobó el viernes un proyecto de ley para crear un impuesto del 3% a los ingresos generados por algunas actividades de los gigantes de internet, como los GAFA, pero no es seguro que el proyecto llegue a aprobarse, pues el gobierno español no cuenta con mayoría en el parlamento.

Con información de AFP