Seis empleados de Google se unieron a los legisladores estadounidenses para respaldar los proyectos de ley que prohibirían el arbitraje obligatorio en los contratos de empleo y consumo.

El arbitraje obligatorio, que impide a las personas llevar las disputas a los tribunales, se ha convertido en un gran objetivo para los activistas de los derechos de los trabajadores en los últimos años.

Requerir arbitraje privado ayuda a las empresas que enfrentan acusaciones de hostigamiento y discriminación eviten el escrutinio público, afirman.

“No podemos tener una conversación honesta sobre los derechos laborales o la restauración de las protecciones de los consumidores hasta que abramos la cortina del arbitraje forzoso, lo que niega a los empleados y consumidores su capacidad de reivindicar sus derechos de manera total y pública”, Tanuja Gupta, empleado de una empresa de Google con sede en Nueva York.

La Ley de Derogación por Injusticia por Arbitraje Forzado (FAIR, por sus siglas en inglés) y varias leyes relacionadas garantizarán que las demandas individuales y colectivas sean una opción en una variedad de disputas, explicaron los miembros del Congreso en la conferencia de prensa.

Los grupos empresariales argumentan que el arbitraje proporciona resoluciones oportunas y que las demandas legales benefician a los abogados más que a los demandantes.

Los legisladores demócratas han intentado reducir el arbitraje obligatorio antes, pero han luchado para obtener el apoyo de sus colegas republicanos.

El senador demócrata Richard Blumenthal indicó que espera que la Ley FAIR al menos pase la Cámara controlada por los demócratas este año.

“Este proyecto de ley se trata de garantizar a cada individuo su día en la corte”, dijo Blumenthal.

Andy Phelan, portavoz del Representante Hank Johnson, quien durante mucho tiempo ha respaldado los cambios en el arbitraje, dijo que los trabajadores tecnológicos perjudicados por tales disposiciones nunca antes habían aparecido en una presentación de ley.

La semana pasada, Google se convirtió en la última de un puñado de compañías tecnológicas en anunciar que ya no requeriría que los empleados arbitren las disputas laborales.

Miles de trabajadores de Google abandonaron brevemente el trabajo en noviembre pasado como parte de una manifestación organizada por Gupta y algunos otros para abogar por cambios en las políticas laborales, incluido el arbitraje.

Google se negó a comentar sobre el apoyo de los empleados a los cambios legislativos.