La Corte Suprema de Estados Unidos dio un duro golpe a Apple al permitir que los consumidores puedan demandar a la firma con sede en California por la gestión de su plataforma de descarga de aplicaciones App Store.
La empresa fue acusada de monopolizar el mercado de las aplicaciones para los iPhone y obligar a los consumidores a pagar en exceso.
La Corte no atendió la defensa de la compañía que buscaba evitar reclamos de que sus prácticas violan la ley antimonopolio.
La decisión de la máxima instancia judicial estadounidense, que probablemente implicará importantes consecuencias económicas para todos los gigantes de las nuevas tecnologías, fue aprobada por una estrecha mayoría: cinco magistrados de un total de nueve.
Dejar a los consumidores a merced de minoristas monopolísticos simplemente porque los proveedores en el otro extremo también podrían demandar a los minoristas, contradiría directamente el objetivo de la aplicación eficaz de la ley privada en casos de competencia,
explicó uno de los jueces sobre el fallo.
Propietarios del popular iPhone presentaron un reclamo ante la justicia en 2011 contra la tecnológica, a la que acusan de aprovechar su posición de monopolio en la venta de aplicaciones, solo disponible a través de la App Store.
Apple cobra una comisión del 30% por la compra de aplicaciones diseñadas por desarrolladores independientes, lo que en última instancia aumenta su precio de venta y penaliza a los consumidores, señalan los demandantes.
La compañía, respaldada por el gobierno de Donald Trump, argumentó que solo actuaba como un agente para los desarrolladores de aplicaciones, que establecían sus propios precios y pagaban una comisión a Apple.
El argumento de la firma, apoyado por otros gigantes californianos de internet como Amazon, Facebook y Google, fue rechazado por la Corte Suprema.
Apple indicó además que los inconformes no estaban facultados para actuar, ya que no son sus “clientes directos”.
Sin embargo, los consumidores destacaron que cuando compran, pagan a Apple y no a un desarrollador de aplicaciones, por lo que los usuarios de iPhone que presentaron el caso dijeron que fueron víctimas directas de los recargos.
La empresa argumentó previamente que un fallo de la Corte Suprema que permitiera que el caso proceda podría representar una amenaza para el comercio electrónico, un sector de la economía de Estados Unidos en rápida expansión que genera cientos de miles de millones de dólares en ventas anuales.
Las acciones de Apple cayeron más de 5% después de que los jueces confirmaron la decisión de un tribunal inferior para permitir que la demanda colectiva siga su curso.
Con información de Reuters