El cambio en los hábitos de consumo y formas de comprar a partir del confinamiento en marzo elevó los pronósticos de que las aplicaciones de entrega a domicilio o delivery como Uber Eats, Rappi y Didi Food crecerían a triple dígito. Por otro lado están los establecimientos que logran vender y entregar a través de éstas, pero, ¿realmente se benefician tanto como las mismas apps?

La industria restaurantera cambió por completo al tratar de subsistir únicamente con las ventas para llevar y las de apps de delivery. Sin embargo, la segunda opción implica costos que comienzan a impactar las ganancias de algunos establecimientos. 

Cuando empezaron, las apps eran una opción más para vender y el costo no nos pegaba tanto. Actualmente es para que ya hubieran bajado las tarifas (las aplicaciones) pero no quieren a pesar de que han tenido más demanda

 dijo Marco Buendía, presidente de la Canirac a EL CEO

Buendía comentó que es insostenible para los restaurantes continuar con las comisiones actuales, además de que, a partir de junio, las plataformas digitales, que son residentes en el extranjero sin establecimiento en México, comenzaron a recaudar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de los usuarios mexicanos.

El impuesto se aprobó en el Paquete Económico 2020, que contempla que el gravamen del IVA a la importación de servicios digitales se aplicará a servicios que son de consumo final.

“Por 100 pesos que ellos cobran, nos devuelven 55 pesos. Hay una descapitalización tremenda al restaurante. Nada más sale nuestro costo”, comentó Buendía. 

Tecnología propia, la alternativa 

Uber Eats y Rappi, sin especificar un porcentaje, respondieron a EL CEO que fijan el monto de acuerdo a las características particulares de cada establecimiento. 

El cobro de la comisión de Rappi varía dependiendo del cheque promedio, calidad operativa y número de sucursales. 

Uber Eats lo establece después de una evaluación, caso por caso, para asegurarse de que el acuerdo sea de beneficio mutuo.

Didi Food México dijo a EL CEO que cobra una comisión del 30%, la cual está calculada para absorber los costos de envío e impactar lo menos posible a la comunidad.

En los próximos días, la Canirac volverá a sostener pláticas con las plataformas para pedir nuevamente la reducción de comisiones.

A la vez la industria restaurantera planea opciones. 

Estamos buscando cómo hacer nuestras propias aplicaciones para hacer nuestro propio delivery y pick up

 Marco Buendía

Agregó que piensan en esta opción debido a que las bajas ventas, el cobro de comisiones y la retención de impuesto les quita el flujo de efectivo. 

Canirac estima que van a cerrar por lo menos 10% de los negocios a nivel nacional. En CDMX, que cuenta con 57,000 establecimientos, es probable que 5,000 no vuelvan a abrir. Esta cifra será  confirmada hasta que el país entre a semáforo verde. 

Negocios que nacen en medio de la pandemia 

Palo de Rosa, pequeño negocio ubicado en la colonia Nápoles, dirigido por tres mujeres, comenzó a vender café, desayunos y postres apenas hace dos meses. 

El establecimiento inició operaciones en medio de la pandemia y,  por ahora, el 70% de sus ventas son que pasan a recogerlas o se las envían a domicilio y mediante las aplicaciones de delivery las ventas les representan el 30%.

Ha sido difícil, pero nos apoyamos mucho en la gente con la compra local. No tenemos las ganancias que quisiéramos, pero se trata de persistir ante esta situación

 dijo Montserrat Vieyra, una de las tres fundadoras de Palo de Rosa

En estos dos meses han operado con las aplicaciones de Uber Eats, Didi Food y próximamente Rappi. 

Yoshimi Martínez, fundadora de Palo de Rosa, comenta que el cobro de comisión de Uber Eats y Didi es de aproximadamente de 30% de lo vendido cada semana. 

Ambas fundadoras consideran que las apps son importantes porque, al tratarse de un pequeño local que apenas comienza, la venta por una app conocida le da mayor confianza a los clientes. 

Aunque, para evitar problemas financieros como de organización, tres apps, más servicio de pick up es más que suficiente para el negocio. 

Viene un nuevo concepto de cocina. La gente ya vió que puede estar en su casa y le pueden llegar infinidad de cosas. Ya se acostumbró a que todo llega fácil: desde el súper hasta la comida favorita. Es a lo que nos vamos a dedicar un largo rato

 Yoshimi Martínez, fundadora de Palo de Rosa