La creciente mudanza hacía el mundo digital por parte de las personas de a pie y las grandes compañías ha traído consigo un incremento en el número de hackers, que gracias a sus conocimientos técnicos requieren de menos ciberataques para obtener lo que buscan.
Durante el año pasado, los intentos de ataques cibernéticos en México se ubicaron en 94,000 millones, cifra menor a los 187,000 millones registrados en 2022, sin embargo, esto no es necesariamente una buena noticia, según datos de FortiGuard Labs, de Fortinet.
Si bien los ataque masivos registran un considerable descenso, esto se debe en gran parte a que las nuevas variantes de virus como malware y ransomware están mucho mejor dirigidas.
Esta creciente tendencia ha provocado que las agresiones sean más sofisticadas y cuenten con mayor posibilidad de éxito, sobre todo si los usuarios no cuentan con defensas de ciberseguridad integradas, automatizadas y actualizadas.
La región de América Latina y el Caribe sufrió 200,000 millones de intentos de ataque el año pasado, lo que representó el 14.5% de los ciberataques registrados a nivel mundial. México, Brasil y Colombia fueron las principales víctimas.
Microsoft Office, una oportunidad para los ciberataques
En 2023 diversas amenazas cibernéticas se encontraban vinculadas a aplicaciones de Microsoft Office, y si bien algunas de ellas ya fueron solucionadas mediante parches de remediación, la amenaza ha persistido en donde no se han realizado actualizaciones.
A lo largo del año pasado, el malware fue uno de los virus más aprovechados por los delincuentes y su distribución se dio mediante archivos de Word, Excel y Power Point, alcanzando el 50% de los delitos.
Finalmente, en los últimos tres meses se registró una subida de 950% en las actividades maliciosas en México respecto a igual periodo de 2022. Este fenómeno se vincula a un notable incremento en las tácticas de reconocimiento que buscan sistemas expuestos con el protocolo SIP para llamadas de voz sobre internet.
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