Amazon fue golpeado por un fraude ‘extenso’ con el que hackers pudieron desviar fondos de cuentas de vendedores el año pasado.

Los hackers irrumpieron cerca de 100 cuentas y canalizaron efectivo de préstamos o ventas a sus propias cuentas bancarias, según un documento legal británico.

El ataque se dio entre mayo y octubre de 2018, de acuerdo con un documento escrito en noviembre pasado por abogados de la compañía, pero que hasta ahora pudo darse a conocer.

La firma anunció que seguía investigando las cuentas comprometidas y que consideraba que los piratas lograron cambiar detalles de cuentas en la plataforma Seller Central a los propios en Barclays y Prepay Technologies, de acuerdo con el documento.

Amazon descubrió que las cuentas probablemente estaban comprometidas por técnicas de phishing que engañaron a los vendedores para que entregaran información de inicio de sesión confidencial.

De acuerdo con Bloomberg, el caso evidencia cómo la plataforma de comercio electrónico más grande del mundo que está diseñada para contar con mínima participación humana puede ser mal utilizada.

Los abogados defensores de la empresa solicitaron a un juez en Londres que aprobara las búsquedas de estados de cuenta en Barclays y Prepay, que “se han mezclado inocentemente con el delito”.

La minorista necesitaba los documentos para investigar el fraude, identificar y perseguir a los hackers, ubicar el paradero de los fondos mal asignados, poner fin al fraude y disuadir futuros delitos, de acuerdo con los abogados.

Entre las unidades de Amazon mencionadas aparece Amazon Capital Services UK, que da préstamos a vendedores. La primera transferencia fraudulenta ocurrió el 16 de mayo.

Amazon dijo el martes que emitió más de 1,000 millones de dólares en préstamos a vendedores en 2018, pero no está claro cuánto robaron los hackers.