La revisión de seguridad nacional ha retrasado la venta de la participación de Royal Dutch Shell en la refinería Deer Park a Petróleos Mexicanos (Pemex), dijo la empresa anglo-neerlandesa a Reuters.
De acuerdo con el medio especializado, la aprobación por parte del Comité Federal de Inversión Extranjera en los Estados Unidos (CFIUS) es el último obstáculo para transferir el control total de la refinería de Texas a Pemex.
El pasado 27 de octubre, Octavio Romero Oropeza, director general de la petrolera, indicó que para concretar la compra faltaba detallar aspectos contables, financieros, de precios y del personal que va a seguir acompañando a la refinería para darle continuidad a la operación un par de años.
El directivo indicó que Pemex realizará el pago por la compra de la refinería Deer Park en los primeros días de diciembre, una vez que el gobierno de Estados Unidos autorice la operación.
Añadió que la compra se realizará con recursos del gobierno federal y no de Pemex en la lógica de buscar la autosuficiencia energética.
Acuerdo Shell-Pemex
En mayo se reveló que Pemex acordó un pago de 600 millones de dólares a Shell para adquirir el 50% de participación en la refinería Deer Park ubicada en Houston, Texas.
Con la operación, Pemex se convertiría en la dueña del 100% de la refinería que procesa 340,000 barriles por día.
Deer Park produce alrededor de 110,000 barriles por día de gasolina, 90,000 barriles de diésel y 25,000 barriles de turbosina, además de otros productos en cantidades menores.
Con esta transacción, Pemex contaría con siete refinerías a la que se sumará la de Dos Bocas, Tabasco.
De acuerdo con Pemex, se alcanzaría una producción de un millón 362,000 barriles diarios para abastecer el total de la demanda mexicana de gasolinas, diesel, turbosina y otros petrolíferos.
Bajo el acuerdo de venta anunciado en mayo, Shell mantendrá el control de su planta química de la instalación de Deer Park y la compañía solo tendrá una refinería en los Estados Unidos, la planta de 230,611 barriles por día.