El regreso a clases presencial orquestado por Secretaría de Educación Pública (SEP) no tiene una ruta ni objetivos claros, las escuelas básicas no cuentan con infraestructura esencial y además se destinó un menor presupuesto a programas de desarrollo docente y distribución de materiales educativos, lo que contrasta con el fuerte aumento al programa ‘Aprende en casa’.

El lunes 30 de agosto,  niñas, niños y adolescentes regresaron a las aulas a tomar clases presenciales, tras un año y cinco meses de clases remotas bajo el programa ‘Aprende en Casa’, al que en 2020 se destinó un presupuesto cercano a los 97 millones de pesos.

El regreso, se da en un escenario donde estudiantes y docentes enfrentan desafíos que están ligados a infraestructura deficiente en distintos niveles, además del rezago educativo e impacto emocional en los estudiantes debido a la pandemia.

Sin embargo, el impacto en la población estudiantil al regreso no se puede medir de manera horizontal, pues además de los diferentes entornos educativos, la brecha económica y sobre todo de género tiene un mayor impacto en las niñas y las adolescentes, que podría abonar en el abandono escolar.

Si bien esto no es privativo de las niñas y adolescentes, les impacta más dado el contexto social que enfoca en las mujeres el cuidado de terceros y las tareas del hogar, lo que supone un alto factor de riesgo.

‘Aprende en casa’, presupuesto 2.7 veces más alto

La empresa Manatie Prod S.A de C.V es la encargada nuevamente de producir los materiales educativos para el programa a distancia ‘Aprende en Casa’ gracias a dos nuevos contratos que tienen una vigencia del 14 de agosto al 31 de diciembre de este año, según el portal de compras Compranet.

Uno de los contratos está a cargo de la Dirección de Adquisiciones de la SEP, cuyo responsable es Jesús Alfonso Rubio Gónzalez y es por un importe total sin IVA de 183 millones 189 mil 655.17 pesos, un contrato que se centra en la producción de material educativo.

El otro contrato corresponde a la Dirección de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios de AprendeMx, un contrato cuyo responsable es Leonardo Abraham Abaroa Miranda, que también se centra en la producción de material educativo para educación básica por un monto de 183 millones 189 mil 655 pesos.

La suma de estos da un total de 366 millones 379 mil 310 pesos, un presupuesto 2.7 veces mayor al destinado a la empresa Manatie Prod en 2020 de poco más de 96 millones 982 mil 758.62 pesos.

Sin inversiones básicas

En México, más del 90% de las escuelas básicas no cuenta con sanitarios mixtos, 27% sin agua potable y más del 60% sin internet, un elemento que fue clave en el acompañamiento de muchos estudiantes junto con el programa remoto de ‘Aprende en casa’ por radio y TV abierta.

Por ello, si bien la reapertura de las escuelas es una acción necesaria para continuar con el proceso de enseñanza-aprendizaje para contener y afrontar los desafíos que dejó el COVID-19, es necesario mantener el esquema de ‘Aprende en Casa’, pues la pandemia aún no termina, dijo Thamara Martínez, coordinadora de Educación y Finanzas Públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, A. C. (CIEP).

Bajo el supuesto de que en 2021 haya claridad en la percepción de las necesidades para los estudiantes, no existe la inversión suficiente para asegurar el acceso al sistema educativo a todos los alumnos, lo que atenta contra un derecho humano y constitucional, y además merma su formación académica, agregó Martínez.

Lidiar con la postpandemia

Es evidente que hay un impacto a nivel emocional y de aprendizaje, que varía de acuerdo a las circunstancias que tuvieron las distintas comunidades para aprender a la distancia, afectaciones que no se pueden generalizar, pues depende si hubo acceso a TV, radio, internet y acompañamiento, comentó por su parte Marco Fernández, coordinador del programa Educación de México Evalúa y profesor de la Escuela de Gobierno del Tec de Monterrey.

“Si no hay acompañamiento, la probabilidad es que se aprenda menos. El combinado de alumnos que no aprendían a distancia, otros afectados emocionalmente y otros sin acompañamiento, aunado a una situación económica precaria abona a un mayor rezago”, dijo Fernández.

CIEP se dio a la tarea de revisar los programas presupuestarios que componen al gasto educativo, quien halló solamente tres programas presupuestarios que se alinean a los objetivos de Aprende en Casa, y en todos ellos hay reducciones para este año, principalmente a nivel de desarrollo profesional docente, en donde la inversión se redujo 45.6% respecto al 2020.

“Cuando el programa se echó a andar, también se iba a capacitar a los profesores para la enseñanza a distancia, pero que ahora no es claro si la estrategia va a seguir, no hay un presupuesto ni metas claras”, comentó Martínez.