La renuncia de Carlos Romero Deschamps a la dirigencia sindicato petrolero marcó el inicio de una etapa nueva en el sindicalismo en México, declaró este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Lo de ayer es el inicio de una etapa nueva, de cómo se termina el ciclo de un dirigente que tardó bastante tiempo en la conducción de un sindicato,

dijo el Ejecutivo Federal en su conferencia matutina.

Se congratuló por la salida de Romero Deschamps, quien estuvo al frente del gremio por 26 años y sobre el que pesa una investigación por el origen de sus recursos.

“Celebro lo que pasó ayer y que se haya logrado sin violencia (…), ahora se está logrando este cambio de manera pacífica de acuerdo al orden legal establecido”, apuntó.

Aseguró que ahora hay una nueva realidad en el país y que con las reformas laborales publicadas en mayo ahora se tiene que respetar a los trabajadores para que elijan de manera libre y democrática a sus representantes.

Es inmoral cómo un dirigente de trabajadores va ser al mismo tiempo un potentado. ¿De dónde sale ese dinero?,

manifestó.

Dijo que se tiene que terminar con esa etapa y poner por delante la democracia y la honestidad, y que son los trabajadores los que tienen que lleva a cabo estos cambios.

En las reformas laborales se establece que los trabajadores podrán decidir si pertenecen a un sindicato o no, y que los líderes serán elegidos a través de una votación de trabajadores de manera libre, secreta y directa.