Un total de 327 migrantes, entre ellos unos 120 menores, fueron encontrados en una casa de Cadereyta, Nuevo León, hacinados en condiciones “infrahumanas”, informó el Instituto Nacional de Migración (INM).
De acuerdo con un comunicado difundido por el gobierno federal, la vivienda se encuentra en el municipio de Cadereyta y fue ubicada luego de que algunos de los migrantes acudieron a un hospital de la zona a visitar a una persona internada.
“Durante la inspección de la vivienda se constató que las 327 personas migrantes extranjeras permanecían sin agua, alimentos y en condiciones infrahumanas, de hacinamiento, de vulnerabilidad e insalubres que ponían en riesgo la vida”, señala el texto.
Las autoridades no detallaron las nacionalidades de los migrantes ni su destino.
El grueso de los indocumentados que recorren México son centroamericanos y las autoridades migratorias suelen proceder a su deportación cuando son detenidos o rescatados en el camino hacia la frontera con Estados Unidos.
Cadereyta se encuentra a menos de 250 km de la frontera con Estados Unidos y es una zona de paso de migrantes al ser una de las rutas más cortas desde el centro y el sur de México.
Operativo en Chiapas
Este operativo se realiza mientras que en Chiapas avanzan dos caravanas de unos cientos de migrantes, la mayoría centroamericanos, que recorren la carretera intentando burlar los operativos de la Guardia Nacional para detenerlos.
Los migrantes, que huyen de la violencia y la pobreza en sus países, buscan llegar a Estados Unidos para pedir refugio.
Tras la llegada del demócrata Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos, se ha multiplicado el número de migrantes que intentan cruzar ilegalmente desde México, muchos de ellos menores de edad.
Para contener la migración ilegal, el gobierno mexicano tiene desplegados más de 27,000 guardias nacionales y militares.