La reunión de Andrés Manuel López Obrador este miércoles con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, es parte de una visita que se espera brinde una mayor certidumbre de México a los mercados internacionales, pero que también puede tener su efecto en Petróleos Mexicanos (Pemex).
Lagarde viaja al país para asistir al Women’s Forum en la Ciudad de México, sin embargo especialistas coinciden en que el tema obligado a tratar es la viabilidad de los proyectos de la petrolera, lo que puede redundar en un mensaje negativo para la firma.
“La visita de Lagarde mandará un mensaje de tranquilidad y de certidumbre a los capitales internacionales. Pero el FMI también necesita saber que los planes de Pemex son viables financieramente. Solo así el organismo puede respaldar a la petrolera”, opina Leonel Carranco, economista de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Durante su conferencia matutina del lunes, el presidente de México confirmó su reunión con la economista francesa, en la cual adelantó que su gobierno no contempla recurrir a un nuevo crédito del FMI.
¿Por qué le preocupa Pemex al FMI?
En los reportes sobre ‘Perspectivas de la economía mundial’, que publica periódicamente el FMI, México es considerado como una economía de mercados emergentes y en desarrollo, junto con países como Brasil, Nigeria, Sudáfrica, Rusia, China, India, Arabia Saudita.
La principal preocupación del organismo para este grupo es que un tropiezo económico de cualquiera ocasione desconfianza en el resto de países, dice Carranco, lo cual podría suceder si Pemex recibe una rebaja de la nota crediticia por parte de las firmas calificadoras.
“Pemex es el mayor emisor de bonos de todos los mercados emergentes, por lo que una rebaja en el nivel crediticio puede ser un punto de inestabilidad y yo creo que ahí es donde Lagarde quiere saber qué es lo que está pasando y cómo se va a mover la empresa en el futuro”, indica el economista en entrevista con EL CEO.
De acuerdo con los estados financieros que la compañía envía a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos cada año, Pemex es la petrolera más endeudada del mundo con 106,000 millones de dólares (mdd), por lo que una degradación crediticia podría dejarla en coma.
Para mantener la calificación de la empresa productiva del Estado, es importante el respaldo del FMI a los proyectos gubernamentales de la firma. De otro modo, las finanzas de la petrolera están en riesgo, agrega Carranco.
A principios de este año, Fitch redujo la calificación de Pemex en dos grados a BBB-, con lo que dejó sus bonos a un grado de convertirse en basura. En tanto que la calificadora Standard & Poors modificó de estable a negativa la perspectiva de la calificación de la compañía.
Focos rojos
Estos cambios obedecen a los planes que el gobierno de López Obrador tiene para la petrolera, principalmente el de la nueva refinería que planea construir en el puerto tabasqueño de Dos Bocas, dice el profesor en Economía de la UNAM, Alejandro Álvarez Bejar.
“Se debe tener algún diálogo para discutir con cuidado las estrategias energéticas, principalmente para Pemex y sobre todo el proyecto de la refinería, que se ve como un proyecto que no tiene mucha viabilidad financiera y que puede comprometer las finanzas de Pemex”, dice el académico.
De acuerdo con los cálculos del gobierno, Pemex invertirá 8,000 millones de dólares (mdd) en Dos Bocas. No obstante, la licitación para su construcción se declaró desierta debido a que ninguno de los participantes garantizaba el cumplimiento de dichos términos.
Algunos cálculos estiman que el proyecto podría costar incluso el doble, lo que también podría debilitar las finanzas de la petrolera mexicana, tomando en cuenta que la producción también se ha comportado en los últimos años, dice Álvarez Bejar.
Para el mes de abril, Pemex reportó una producción promedio de 1.69 millones de barriles por día (bpd), el menor nivel para un cuarto mes desde que la petrolera lleva registro. Ese nivel significa una caída del 10.3% respecto al mismo mes del año pasado.
En los últimos dos años la producción de petróleo crudo cayó alrededor del 28%, de acuerdo con los datos del Sistema de Información Energética (SIE) de la Secretaría de Energía.
El FMI le recortó a México sus expectativas de crecimiento de 2.5% a 1.6% en octubre del año pasado, un pronóstico en el que influyó la crisis financiera que enfrenta Pemex.
Según dijo en conferencia a mediados de abril el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner, el organismo espera que Pemex presente un plan de negocios que genere confianza y que permita conocer cómo se van a lograr niveles de eficiencia y de productividad para incrementar la producción, solidez financiera y beneficios para la empresa.