El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) comenzará sus operaciones y a ejercer sus facultades con un comisionado menos luego de la salida de Adolfo Cuevas Teja, quien terminó su encargo como comisionado tras poco más de ocho años, lo que deja un Pleno con solo cuatro integrantes y varios desafíos por delante.
Para hacer frente a esta nueva etapa, en la que faltan tres comisionados para completar el Pleno, la autoridad reguladora ‘tomó cartas en el asunto’ días antes de la salida de quien fungió como presidente interino, al hacer cambios en el Estatuto Orgánico que les permita tomar decisiones sin una plantilla completa.
Te puede interesar: Cofece e IFT, “lo mejor sería que no existieran”: AMLO
Los cambios implican un ajuste en el quórum necesario para que sesione, así como para convocar a sesiones extraordinarias, que hasta antes de las modificaciones requería de cuando menos cuatro comisionados para sesionar válidamente.
Además, en casos en materia de competencia, las deliberaciones debían contar con los votos de todos los comisionados, excepto que no pudieran ejercerlo por causas debidamente justificadas o que estuvieran impedidos para ello.
Hasta antes de la modificación, las sesiones extraordinarias podrían ser convocadas por el presidente o por cuando menos cuatro comisionados, a través del Secretario Técnico del Pleno, con al menos veinticuatro horas de anticipación.
Ante la salida de Cuevas Teja, Javier Juárez Mojica asume como presidente interino, con la incertidumbre de cuándo se van a nombrar al menos a las dos comisionadas cuyos perfiles tienen que ser elegidos por el presidente Andrés Manuel López Obrador y enviados al Senado para su ratificación.
¿Cómo se eligen a las Comisionadas y Comisionados que integran el Pleno del @IFT_MX?
¿Cómo impacta a los #Usuarios, #Audiencias y a la industria de #telecomunicaciones y #radiodifusión la falta de nombramientos de Comisionadas? 👇🏻 pic.twitter.com/Z7cUi8VuYo— Arturo Robles (@ArturoRobles_R) February 16, 2022
Gobernanza interna, principal reto
Para María Elena Estavillo, excomisionada del Instituto, uno de los principales retos internos es que trabajen muy bien en un esquema de gobernanza interna, dado que el IFT fue diseñado como un órgano colegiado como máxima entidad de decisión.
Por la propia cultura “que es muy jerárquica, autoritaria y patriarcal” – y eso se ve en todos los ámbitos -, ‘choca’ con este diseño establecido que requiere colaboración entre pares, dijo.
Sí se puede hacer mucho, pero cuidando el tipo de reglas internas que tienen que darse para que pueda haber más colaboración, sin entrar en dinámicas en donde se contrapone el presidente con el resto de los comisionados
En ese sentido, Estavillo sugirió que el Pleno de comisionados debe tener mas inteligencia colectiva y estudiar el tipo de reglas que les pueda ayudar para no entrar en estas situaciones de diferencias entre comisionados.
Incongruencias del Ejecutivo
Contrario a lo que dice López Obrador, la excomisionada señala que sí ha habido acercamientos entre el primer mandatario y funcionarios del Instituto. Y tras las últimas declaraciones, es claro que hay una “tremenda incongruencia”.
Esto, por ejemplo, en la afirmación de que corresponde al IFT garantizar la conectividad, lo que no es así, pero además tampoco es el problema de raíz.
Para Estavillo Flores, si bien es cierto que falta cobertura en algunas zonas, que es donde hay que tener estrategias específicas, hay muchos lugares del país donde sí hay cobertura, y de cualquier manera hay una brecha digital grande.
El problema es más complejo, pero si no tenemos un equipo que entienda eso, no vamos a poder resolver los problemas.
