A partir del último día de febrero de 2022, el Pleno del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) quedaría con solo cuatro comisionados de los siete que deben integrarlo, un escenario que supone riesgos legales en la toma de decisiones, si no se nombra pronto a una nueva comisionada.
El riesgo radica en que hay decisiones que se basan en la Ley de Competencia o en la Ley de Telecomunicaciones y Radiodifusión que deben ser tomadas por cinco comisionados, pues así lo establece la ley, explicó el comisionado presidente interino Adolfo Cuevas Teja.
En ese sentido, explicó que en el diálogo más reciente con el presidente Andrés Manuel López Obrador se manifestaron los riesgos a los que podrían enfrentarse, por lo que le solicitaron contar con un Pleno completo de siete comisionados.
Al cuestionar al IFT sobre las decisiones que podrían implicar estos riesgos, el comisionado Arturo Robles Rovalo aseguró que aunque podría incluso tratarse de decisiones mínimas, todas son de suma importancia.
Esto, debido a que dichas decisiones podrían implicar asuntos sobre fusiones, de poder sustancial o decisiones relacionadas con la Autoridad Investigadora (AI) del IFT.
En el caso de la Autoridad Investigadora, por ejemplo, resulta indispensable contar con cinco votos del Pleno para nombrar al titular o considerar hacer modificaciones en el estatuto orgánico.
Vacantes, aún sin ocupar
A finales de noviembre, el Comité de Evaluación, encargado del proceso de selección de los candidatos a comisionados tanto del IFT como de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) envío al primer mandatario la lista de las cinco aspirantes calificadas para ocupar una de las vacantes en el Pleno del Instituto.
La elección de quién ocupará el cargo corresponde al presidente de la República y la ratificación al Senado. En esta convocatoria en particular, la vacante es para ocupar el lugar que dejó Gabriel Contreras Saldívar en 2020.
La elección de la próxima comisionada se da luego de un proceso fallido celebrado a principios de 2021, cuando la mayoría del Senado votó en contra de la ratificación de las dos candidatas en ese momento al considerar que en los perfiles imperaba ‘falta de idoneidad’.
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Sin embargo, aún faltaría por cubrir el asiento que dejó Mario Fromow y también la silla que dejará vacante Cuevas Teja el último día de 2022 al término de su encargo.
AMLO desaira a autónomos
Hace un año, López Obrador advirtió sobre la necesidad de evaluar el funcionamiento no solo del IFT, sino también de Cofece o del INAI, al considerar que son organismos que ‘no tienen ninguna función social’.
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Pese a esa postura, el primer mandatario ha instruido nuevas funciones al IFT, como la obligación de ser el responsable de desarrollar el Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut), sin asignar presupuesto adicional.
Sin embargo, aún falta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelva el fondo de la controversia constitucional promovida por el IFT, lo cual podría ocurrir en 2022.
Por tanto, el Panaut está en pausa, un registro cuyo costó ascendería a poco más de 300 millones de pesos adicionales al presupuesto asignado, según cálculos del propio Instituto.
Por su parte, la Cofece interpuso una controversia en contra de la omisión del Ejecutivo al no nombrar a los comisionados que ocuparán las tres vacantes.
