La Comisión Reguladora de Energía y la Comisión Nacional de Hidrocarburos sufrieron recortes de alrededor de un millón de pesos cada una (cerca del 20%) por concepto de previsiones salariales y económicas en el PPEF 2020. Se trata del más reciente golpe a la operatividad de ambos entes reguladores, lo que podría tener un fuerte impacto en el sector energético.

Lo más importante para el gobierno es procurar la certidumbre y el respeto a las reglas del juego. Lo que no le conviene es cambiar las reglas porque manda señales cruzadas a los participantes. Creo que el Gobierno tiene una responsabilidad de procurar que legalmente se conserven las facultades de CNH y CRE para que permanezcan como reguladores y jueguen el papel que han venido jugando

Arturo Carranza, Analista del sector energético

Las situaciones de CNH y la CRE son muy distintas e incluso podrían considerarse opuestas, pues una está sucumbiendo a debates internos, mientras que la otra ha visto cambios políticos que aminoran su campo de acción.

La CNH se ha mantenido relativamente intacta a su interior, pero decisiones políticas han disminuido sus responsabilidades y la han convertido en lo que Miriam Grunstein, Investigadora asociada al Centro México de Rice University, llamó “una ventanilla donde Pemex puede realizar ciertos trámites”.

Esta ventana está encargada de aprobar los planes de desarrollo de los campos que Pemex ha señalado como prioritarios para la compañía. Estos procesos solían tardar entre 9 y 12 meses, pero actualmente están tomando alrededor de una semana. De acuerdo con analistas esto se debe a que en estos momentos la aprobación es una de las pocas funciones atribuibles a CNH, además de que se trata de campos con los que el regulador ya estaba familiarizado.

El tema con CNH es que no se han desarrollado las áreas donde se supone que va a ser un órgano regulador fuerte. Además, dadas las políticas energéticas actuales quizá no hace sentido otorgarle más recursos. El mayor trabajo de CNH va a venir cuando empiece a evaluar campos en desarrollo que ya estén produciendo

Paul Sánchez, Director de Ombudsman Energía México

En la actualidad, la mayoría de los campos asignados por las rondas siguen en etapa de exploración, o al menos no están listos para producir, además de que el Ejecutivo ha declarado que no licitará nuevas rondas. Todos estos elementos señalan que la reducción de salarios, por sí misma, podría no necesariamente debilitar al regulador.

Mientras tanto, la CRE ha sufrido cambios constantes desde abril de este año, cuando vio la renuncia de tres de sus comisionados. Las ternas propuestas por el Presidente para llenar estas vacantes fueron criticadas fuertemente, sobre todo cuando se presentaron por segunda vez con agrupaciones distintas de los candidatos.

Los críticos señalaban que los candidatos carecían del conocimiento necesario para ocupar el puesto, y que se habían elegido exclusivamente con el objetivo de que estuvieran alineados ideológicamente con el plan que la administración federal tiene para el sector energético.

Estas críticas revivieron el pasado 12 de septiembre, cuando el comisionado con licencia José Alberto Celestinos Issacs declaró que el órgano frenaría la expedición de permisos a gasolineras que operaran bajo marcas distintas a Pemex. La CRE tuvo que emitir un comunicado en el que señala que “las opiniones públicas expresadas por los Comisionados son a título personal y no representan la postura de la Comisión”.

Contrario al caso de CNH, la CRE no sólo ha visto un recorte de salarios, sino recortes de personal constantes que se han deshecho de puestos importantes y han dejado a la comisión en una posición más precaria, consideraron expertos.

Esta posición ha permitido a los regulados (Comisión Federal de Electricidad y Pemex) ejercer presión en temas de unificación, cambio de tarifas o apertura a la competencia; presiones a las que CRE no se ha podido resistir de forma satisfactoria.

Además, las discordancias entre “nuevos y viejos” comisionados se han traducido en pleitos por el control interno de la Comisión, lo que ha dificultado el trabajo armonioso del regulador. Al día de hoy, ambas comisiones carecen de un comisionado presidente.

(Hay) un panorama energético muy complicado en México(…) Es algo sistémico y orgánico: CNH y CRE no tienen sentido sin un mercado y el mercado no tiene sentido sin ellos. Parece que se acabó la transición del modelo anterior al mercado regulado. No creo que los mercados sean la panacea para el desarrollo, pero el control estatal es aún peor

Miriam Grunstein, Investigadora asociada al Centro México de Rice University