Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se lanzó en contra de las calificadoras internacionales, luego de que Fitch rebajara la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex) de BB- a BB + con perspectiva negativa y de que Moody’s mantuviera la nota, pero cambiara la perspectiva de estable a negativa.
No afecta en nada, es parte de la simulación que existía en el periodo del predominio del modelo neoliberal
dijo López Obrador respecto a la medida que se traduce en dificultades económicas y de financiamiento para Pemex.
El mandatario federal afirmó que Pemex aumentó su producción de crudo y bajó sus costos de extracción, lo que ha generado mayores utilidades en la empresa, y resaltó lo invertido en refinación, “lo que no se había hecho en 40 años”.
López Obrador destacó que desde el inicio de su mandato, la deuda de Pemex ha disminuido 15.5% y señaló que ganarle a las reguladoras es muy difícil, porque van a argumentar que hay otras variables de medición.
Además, López Obrador recalcó que la situación de Pemex no tendrá impacto en la nota soberana, ya que la economía del país se encuentra sólida.
Como ejemplo, dijo, la inflación ha disminuido, ya que de acuerdo con información del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), la tasa de inflación general bajó en la primera quincena de julio hasta el 4.79%, su mejor nivel desde marzo de 2021.
Este dato implica 12 quincenas consecutivas a la baja tras el índice de 5.06% de todo junio y después de haber iniciado el año con el 7.91%.
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Bonos de Pemex bajan
La semana pasada los bonos de Pemex fueron los mayores perdedores en América Latina, luego de que Fitch Ratings rebajó aún más la calificación de la empresa y se mantuviera una perspectiva negativa sobre la deuda.
Los pagarés con vencimiento en 2025 de la petrolera mexicana cayeron 1.6 centavos alrededor de 95 centavos por dólar estadounidense.
La calificadora señaló que la producción de petróleo de la empresa no crecerá y que los recientes accidentes han puesto en duda la capacidad operativa de la estatal a medida que aumenta la carga de la deuda.
Asimismo, Moody’s mantuvo en B1 la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex), pero cambió su perspectiva de “estable” a “negativa”.
La calificadora explicó que el cambio refleja su visión de que ante la falta de cambios fundamentales en la estrategia de negocio de Pemex, la petrolera podría enfrentar mayores riesgos crediticios.
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Con información de Bloomberg
