Masari Casa de Bolsa está en proceso de obtener la licencia bancaria, un movimiento estratégico con el que su principal accionista, Fredie Farca Charabati, entraría al negocio más lucrativo del sistema financiero mexicano.
El trámite inició hace algunos meses y avanza de manera ágil dentro de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), que encabeza Jesús de la Fuente Rodríguez.
Las personas cercanas a Fredie Farca saben de primera mano que la licencia bancaria ha sido el gran objetivo del empresario, quien también es presidente del consejo de administración de ION Financiera. El timing no podría ser mejor: los bancos han reportado ganancias históricas gracias a las elevadas tasas de interés que persisten por los niveles de inflación.
Masari operó como casa de cambio de 1986 a 2008, año en el que la CNBV le dio la autorización para constituirse como casa de bolsa, en medio de cambios regulatorios para el sector.
Otras casas de bolsa que cambiaron su régimen de organización fueron Intercam, CI, Monex y Base.
No sería la primera vez que una casa de bolsa pasa a ser un banco. Como ejemplo están Grupo Financiero Inbursa de Carlos Slim, que nació en 1965 de Inversora Bursátil (casa de bolsa que sigue operando), o Interacciones, que en 2018 se fusionó con Banorte.
En México operan 50 bancos en la actualidad, de los cuales, BBVA México, Santander, Banorte y Banamex dominan el mercado. El plan de Masari llama la atención, pues no figura entre los intermediarios bursátiles más grandes por el número de activos que maneja.
Aún así, el negocio ha crecido. La institución ofrece los servicios de asesoría de inversión, operaciones en el mercado de dinero, el mercado capitales e instrumentos derivados, servicios fiduciarios de representación común, gestión de inversiones, intermediación bursátil, además de que cuenta con una robusta área de análisis económico.
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