Uber compró este lunes a Postmates por 2,650 millones de dólares, con lo que busca tener mayor presencia en el negocio de reparto de comida a domicilio, cuyo sector está en auge debido al confinamiento.

Para el acuerdo, la compañía ofrece una prima de alrededor del 10% sobre la última valoración de Postmates, de 2,400 millones de dólares. En septiembre, Postmates recaudó 225 millones de dólares en una ronda de financiación entre inversionistas.

La transacción se basa en un acuerdo estructurado al 100% en acciones y por lo cual Uber calcula que emitirá 84 millones de acciones ordinarias para financiar la compra.

Uber y Postmates han compartido durante mucho tiempo la creencia de que plataformas como la nuestra pueden impulsar mucho más que solo la entrega de alimentos: pueden ser una parte muy importante del comercio local y las comunidades, lo que es aún más importante durante una crisis como la del COVID-19,

dijo Dara Khosrowshahi, CEO de Uber.

Los consejos de ambas empresas han aprobado la transacción y accionistas que representan la mayoría de las acciones en circulación de Postmates se han comprometido a dar luz verde a la operación, añadió la tecnológica.

Postmates opera en 4,200 ciudades de Estados Unidos repartiendo comida y otros productos de restaurantes y tiendas al domicilio de los clientes.

Fundada en 2011 y con sede en San Francisco, Postmates tenía una cuota del 8% del mercado de reparto de comida a domicilio en mayo y, con el acuerdo, Uber tendría una participación de 30%. DoorDash posee el 45% del mercado, según la consultora Second Measure.

La apuesta de Uber para fortalecerse en el negocio de delivery no es la primera con Postmates, pues a inicios del año, Uber comenzó negociaciones con Grubhub para una posible fusión, sin embargo, esta firma terminó por anunciar la fusión con la británica Just Eat.

Durante las primeras operaciones, las acciones de Uber repuntan hasta 4.43%, a 32.03 dólares, de acuerdo con datos de Investing.

Con información de Reuters