La crisis provocada por la pandemia del coronavirus afectó a la economía y con ello el consumo privado en el país, cuyo indicador cayó 22.3% anual en abril, de acuerdo con los datos publicados este lunes por el Inegi. 

Se trata de su mayor caída desde 1994, año en que Inegi comenzó a registrar este tipo de estadísticas.

El indicador mensual del consumo privado en el mercado interior mide el comportamiento del gasto realizado de los hogares mexicanos en bienes y servicios tanto nacionales como importados y da un panorama más significativo del PIB por el lado de la demanda.

Por componentes, los referentes a los bienes y servicios nacionales se observó una contracción de 21.2%, según los datos desestacionalizados, la mayor desde que hay registros.

En tanto, el consumo de bienes y servicios importado tuvo una caída de 30.6% anual, la más pronunciada desde diciembre de 1995, cuando cayó 50.6%.

Según Monex, el consumo tendrá un panorama complejo en lo que resta del año, principalmente por el mercado laboral, pese a la mejoría de otros datos de consumo.

Aunque en mayo algunos de los indicadores adelantados, como las ventas de la ANTAD, han tenido cierta mejoría, consideramos que el panorama para el consumo se mantendrá complicado durante el resto de 2020. Las presiones derivadas del mercado laboral serían uno de los principales factores que contendrían el avance de este componente de la demanda agregada, situación que ya ha sido adelantada por el índice de confianza del consumidor,

indicó Monex en una nota.

Durante el cuarto mes del año -cuando se intensificaron las medidas de distanciamiento social- la percepción de los consumidores mexicanos sobre la economía del país y familia cayó a 32.2 puntos, 9.9 unidades menos que en marzo, de acuerdo con la encuesta de confianza del consumidor y en mayo fue de 31.1 enteros.