Tesla despedirá a 7% de sus empleados de tiempo completo para controlar costos a medida que aumenta la producción de su crucial sedán Modelo 3.
Este es el segundo recorte de empleos que emprende Tesla en siete meses -en junio de 2018 redujo su fuerza laboral en 9%- y se produce tan sólo días después de que recortó los precios de todos los vehículos en Estados Unidos y se quedó corto en las entregas trimestrales de su Modelo 3.
¿Por qué la decisión? El fabricante de vehículos eléctricos ha luchado durante mucho tiempo con sus gastos y el director ejecutivo, Elon Musk, ha estado bajo una intensa presión para estabilizar la producción del Modelo 3, considerado clave para aliviar una crisis de efectivo y lograr rentabilidad a largo plazo.
“Como todos experimentamos de primera mano, el año pasado fue el más desafiante en la historia de Tesla”, dijo Musk en un correo electrónico a los empleados que se publicó en el blog de la compañía.
A futuro, “enfrentamos un reto extremadamente difícil: hacer que nuestros autos, baterías y productos solares sean competitivos en precio con los combustibles fósiles. Aunque hemos logrado gran progreso, nuestros productos aún son muy caros para la mayoría de la gente”, reconoció.
El camino hacia adelante es muy difícil, dijo Musk, y tratar de construir productos que usen energía limpia y asequible requiere esfuerzos extremos y creatividad sin descanso.
“Como resultado de lo anterior, desafortunadamente no tenemos más remedio que reducir el número de empleados. (…) No hay otra manera”, agregó.
Al 31 de diciembre de 2017, Tesla tenía 37,543 empleados de tiempo completo, de acuerdo con su último informe anual.
Un futuro complicado
Según el mensaje de Musk, en el cuarto trimestre de 2018 repitieron la hazaña de reportar ganancias, aunque menores a las del tercer trimestre, gracias a la venta de sus versiones de mayor precio del Modelo 3.
Tesla reportó una ganancia de 311.5 millones de dólares para el tercer trimestre finalizado el 30 de septiembre.
Pero el reto es que, a partir de mayo, deben entregar la versión de rango medio del vehículo, para lograr que más clientes puedan adquirirlo, y seguir trabajando para ofrecer opciones aún más baratas en el futuro cercano.
“Actualmente, nuestra oferta más asequible es el modelo 3 de rango medio (264 millas), con sonido e interiores premium por 44 mil dólares. La necesidad de variantes del Modelo 3 de menor precio se vuelve mayor el 1 de julio, cuando el crédito fiscal en EU baje otra vez a la mitad, haciendo nuestro auto 1,875 dólares más caro, y otra vez al final del año, cuando desaparezca totalmente”, advirtió Musk.
El objetivo final de la empresa es lograr las economías de escala requeridas para manufacturar el Modelo 3 de rango estándar (220 millas) con un precio de 35,000 dólares.
Un hombre con una misión
El fundador de Tesla, continuamente criticado por su estilo de liderazgo, reconoció que “hay empresas muchas que pueden ofrecer un mejor equilibrio entre la vida laboral y personal, porque son más grandes y más maduras o en industrias que no son tan vorazmente competitivas”.
“Para tener éxito en nuestra misión es esencial para asegurar que el futuro sea bueno, así que debemos hacer todo lo que podamos para impulsar esta causa”, concluyó.
Con información de Reuters