El servicio de internet fijo para hogares y negocios se ha convertido en ‘la joya de la corona’ para operadores como Televisa, Megacable y Totalplay, quienes a pesar de que en los últimos años han ido ganando terreno en ese mercado, no han podido arrebatarle la corona a Teléfonos de México (Telmex).

Aunque la mayor participación de mercado de internet fijo tanto del segmento residencial como en el no residencial la tiene Telmex, la disputa por una mayor cuota de mercado se da en la oferta dirigida a los hogares, en donde los competidores ha desarrollado estrategias que los han llevado a posicionarse mejor en este negocio.

Al cierre del primer trimestre del año, la empresa controlada por Carlos Slim registró una participación de mercado en el negocio residencial cercana al 50 por ciento, que si bien la posiciona en el primer lugar, está 20 puntos porcentuales por debajo de la participación que tenía en el mismo periodo de 2013, año en que se promulgó la reforma de telecomunicaciones.

Fue hasta un año después, en 2014, cuando la reforma entró en vigor y, a un lustro de distancia, los efectos medidos por el órgano regulador en el sector telecom muestran una mayor penetración de servicios, más competencia y menores costos en los servicios.

No obstante, para Víctor Pavón Villamayor, presidente de Oxford Competition Economics, aún no se puede definir por completo el impacto y efectividad de esta reforma dado que los cambios se han dado paulatinamente. “Aún estamos en un punto intermedio para ver y saber si sigue siendo efectiva”, considera.

En lo que respecta al segmento no residencial, Telmex también tiene el mayor número de clientes, aunque es un escenario distinto al del hogar, pues la diferencia en la penetración con su rival más cercano, que es Megacable, casi toca los 60 puntos porcentuales.

Al respecto, Pavón Villamayor comentó que Telmex sigue tratando de explotar la conectividad que ya tiene y potenciarla, al ofrecer una mayor calidad del servicio; mientras que los rivales están en un proceso de fortalecer estrategias competitivas.

Las diferencias

Mientras los usuarios residenciales prefieren un proveedor que ofrezca triple play (internet, TV y telefonía), los negocios corporativos o empresariales requieren continuidad, confiabilidad y velocidad en el servicio de banda ancha, dijo Ramiro Tovar, académico y experto en el sector de telecomunicaciones.

En ese sentido, señaló que mantener el impedimento para Telmex de ofrecer televisión, a la par de que se está apalancando el crecimiento de los operadores de redes de cable resulta en que no haya una rivalidad plena en triple play, al menos no todavía.

Ante la posible incursión de Telmex en el segmento de TV de paga, los rivales quieren posicionarse y a la vez retardar la entrada de Telmex lo más posible, por lo que en triple play el incumbente será Televisa y el entrante Telmex

aseguró Tovar.

La competencia

Los movimientos en la participación de mercado de cada uno de los segmentos están relacionados con la regulación asimétrica aplicada a América Móvil, el agente preponderante en telecomunicaciones, así como con la composición de las diversas líneas de negocio de los jugadores, comentó Ana Lilia Moreno, experta en Competencia y Regulación.

En el caso de Televisa, la apuesta por la rentabilidad sigue siendo la TV de paga, un negocio en el que tiene una posición de ventaja frente a Telmex y que pretendería reforzar con la compra de Megacable, aunque ese deseo no garantiza que el IFT se lo permita, sobre todo considerando su participación de mercado en el segmento, comentó Moreno.

“Telmex tiene un problema de incentivos para la inversión derivado de la regulación asimétrica, que se suma a un componente de compartición de infraestructura, pues los competidores solicitan el acceso a la fibra del preponderante para ir avanzando en el mercado, quien se muestra reacio a perder mercado”, apuntó la experta.

¿Y la cobertura social?

Moreno explicó que en el segmento residencial, la tensión entre los operadores es muy relevante pues converge con el problema de cobertura social. En esa línea, explicó que si las redes se duplican o se quintuplican en las mismas localidades donde hay demanda, entonces las áreas sin cobertura seguirán desprotegidas.

El argumento es que si se facilitara la compartición de infraestructura del preponderante, se podría facilitar la inversión para despliegue de cobertura social de la mano de la política pública de Internet para Todos

señaló la experta en Competencia.

Bajo ese escenario, sugiere la necesidad de introducir en el análisis el papel de CFE Telecomunicaciones para facilitar el acceso mayorista junto con la Red Compartida, a fin de que se pueda hacer el despliegue de la última milla hasta cubrir al cliente final a precios competitivos.

Por ello, en su opinión, los operadores que tenían pensado llegar a más lugares en México estarán atentos a la estrategia del gobierno para redefinir sus posiciones en el mercado y seleccionar con más puntería los mercados en donde pueden ir ganando terreno.