El Super Bowl LVI alcanzó una audiencia de 112.3 millones de espectadores, quienes disfrutaron del máximo evento deportivo de la NFL en varios medios, lo cual representó un aumento del 16% con respecto a la disminución de la audiencia del año pasado, según informó Bloomberg.

Los espectadores que vieron el Super Bowl LVI en NBC totalizaron 99.2 millones de personas, mientras que 1.9 millones lo vieron en Telemundo, más 11.2 millones en servicios de transmisión como Peacock, dijo la cadena en un correo electrónico, lo que lo convierte en el Super Bowl más visto en cinco años.

La fuerte participación fue otra señal de que la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL, por sus siglas en inglés) está ganando espectadores a pesar de que el panorama televisivo se está reduciendo. 

Además, las calificaciones de la temporada regular aumentaron 10%. La liga probablemente se benefició de factores como el regreso de los fanáticos a los estadios, un mayor interés en las apuestas deportivas y algunos juegos realmente cerrados.

El enfrentamiento del domingo contó con Los Carneros de los Ángeles derrotando a los Bengalíes de Cincinnati 23-20, luego de que Matthew Stafford lanzara un pase de touchdown de una yarda a Cooper Kupp con menos de dos minutos restantes.

CBS, una unidad de ViacomCBS, dijo el año pasado que atrajo una audiencia de 96.4 millones de televidentes y espectadores digitales para el gran juego. Ese enfrentamiento, con los Tampa Bay Buccaneers en una amplia victoria por 31-9 sobre los Kansas City Chiefs, fue la audiencia más pequeña para el Super Bowl en más de una década.

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Comerciales en el Super Bowl por hasta 7 mdd

NBC, propiedad de Comcast, vendió este año comerciales de 30 segundos para el Super Bowl por hasta 7 millones de dólares, lo cual representó un récord. 

La red dijo que tenía 81 anuncios nacionales; además los anunciantes del juego incluyeron intercambios de criptomonedas, fabricantes de automóviles y servicios de transmisión.

NBC usó la gran audiencia del Super Bowl para impulsar la cobertura de los Juegos Olímpicos de Invierno, que está experimentando una fuerte disminución en la audiencia televisiva. 

La televisora transmitió los eventos olímpicos justo después del Super Bowl, una desviación del pasado cuando las emisoras generalmente usaban ese horario para promocionar un programa de televisión. 

NBC dijo que su transmisión de los Juegos Olímpicos de Beijing, después del Super Bowl, atrajo a 24 millones de espectadores, marcando su mayor audiencia en horario estelar de los Juegos Olímpicos desde el día inaugural de los juegos de invierno de 2018.

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